La nieve aguanta en la montaña y Grazalema se llena de visitantes
La localidad vive un excelente puente de Andalucía para hoteleros, hosteleros y comerciantes, gracias al empujón que ha dado el temporal
GRAZALEMA. Actualizado: GuardarAño de nieves, año de bienes. La frase se encontraba ayer en la cabeza de los hosteleros de Grazalema, al tiempo que sus terrazas se llenaban de visitantes que aprovechaban la nevada de la madrugada del jueves para acercarse a este bello rincón de la provincia. En esta ocasión no se sabe si el refrán traerá esas riquezas para todo el año pero si que se puede afirmar que la nevada ha provocado que se viva un puente festivo como los que hace años que no se recuerda. Y es que a pesar de que muchos visitantes tiran de bocatas, el negocio se vio gratamente ampliado por la gran afluencia de público.
La nieve desapareció de los pueblos que se tiñeron el jueves de blanco e incluso en las zonas de sierra con menor altura, por las montañas mantuvieron en sus zonas más altas un bello manto blanco que animaba a aprovechar el buen tiempo para adentrarse en un paseo por la mañana. No fueron pocos los gaditanos que así lo hicieron, provocando que los senderos se llenaran de paseantes atraídos por las noticias que llegaban al resto de la provincia sobre la nevada más copiosa de los últimos siete años.
El sol y el aumento de las temperaturas comenzaron ayer a derretir la nieve que quedaba, pero en zonas como el Puerto de las Palomas se mantuvo e incluso hoy podrían verse los últimos restos del temporal aunque el sol podría terminar de derretirla por completo. La presencia de nieve y hielo, precisamente, originó en la madrugada del jueves que se cortara al tráfico la carretera CA9104, la que une Grazalema y Zahara de la Sierra a través del Puerto de las Palomas, una situación que ayer persistió. De momento, la Guardia Civil no ha restaurado el tráfico en esta carretera de montaña, por lo que para poder visitar una de las zonas que seguían nevadas ayer había que hacerlo a pie. Mientras en el pueblo no quedaban restos de la nevada y solo se podían observar las montañas desde lejos, pero un estupendo ambiente se podía disfrutar en sus diferentes terrazas. Allí los visitantes reponían fuerzas dando cuenta de la rica gastronomía de la zona.
La probabilidad de nevadas desaparecen por el momento aunque Grazalema mantendrá hoy las temperaturas bajas, oscilando entre los 0 y los 11 grados. A partir del domingo las mínimas subirán unos cuatro grados y a partir del lunes volverán las lluvias.