
El doble voto en Lombardía puede inclinar la balanza en las elecciones generales de Italia
En Milán, clave para vencer en el Senado, también se sustituye el Gobierno regional corrupto de Berlusconi, un factor que le perjudica
ROMA. Actualizado: GuardarSe ha repetido hasta la saciedad que las elecciones generales italianas de ayer y hoy, donde votan 50 millones de personas, se juegan en Lombardía, una especie de 'Ohio' de estos comicios, en referencia al estado que en EE UU suele decidir el resultado en las urnas. La región de Milán es la más grande, la que más escaños proporciona en el Senado y la más incierta para Pierluigi Bersani, del Partido Demócrata (PD), favorito en los sondeos. Puede que gane, pero sin mayoría absoluta en esta Cámara si pierde en Lombardía y otra región importante, como Véneto, dos zonas tradicionalmente conservadoras y fieles a Silvio Berlusconi y a su aliado, la Liga Norte. La paradoja es que al magnate, por muy acabado que esté, le bastaría ganar en estos dos lugares para arruinar el triunfo de Bersani.
Pero si Italia depende de Lombardía, ¿de qué depende el voto en Lombardía? Aquí hay un factor interesante: también se celebran de forma simultánea elecciones regionales porque el Gobierno lombardo ha caído en medio de una apotesosis de corrupción, y era de Berlusconi y la Liga Norte. Al votante milanés le puede resultar muy difícil volverle a votar, encima en dos papeletas.
Esta es una de las claves en unos comicios que cerrarán hoy los colegios a las tres de la tarde y ayer registraban una participación del 45,9%, inferior en 2,41 puntos a la de 2008, salvo precisamente en Lombardía, donde había subido un 6,34%. Lombardía era un símbolo de la 'era Berlusconi' y su presidente, el todopoderoso Roberto Formigoni, lleva cuatro mandatos seguidos desde 1995. Pero ha caído en desgracia tras un año de investigaciones sobre el dinero y los contratos públicos llovidos en su entorno de amigos. Que por alguna razón le pagaban vacaciones en el Caribe y, según se supo hace dos semanas, una manutención casi de por vida en restaurantes caros donde no pagaba nunca o con abastecimiento continuo de cremas faciales.
Es solo la cúspide de una degeneración del sistema, porque el Parlamento lombardo ha acabado marcado en la opinión pública por personajes impresentables metidos con calzador en las últimas listas, como la diputada Nicole Minetti, la azafata sexy organizadora de las juergas de Berlusconi y acusada de favorecimiento de la prostitución en el 'caso Ruby'. Es uno de los grandes símbolos del 'bunga bunga' y la política concebida como abrevadero de amantes y amigotes, porque cobra 12.000 euros al mes sin dar ni golpe. El otro gran enchufado ha sido el hijo del líder de la Liga Norte, Renzo Bossi, 'el Trucha', de 24 años, un inútil que falsificaba títulos universitarios en Albania y se hacía reembolsar hasta los huevos Kinder con dinero público. Lombardía ya tenía el dudoso récord de políticos investigados hasta que el escándalo de los gastos de cada grupo político ha llevado a indagar a 91, todo el Parlamento, de 80 escaños, y alguno más de los despachos. Pasaban facturas incluso de bocatas de nocilla. ¿Olvidará todo esto el votante lombardo?
Lazio y Molise
El caos que vive Italia se refleja en que también se vota en otras dos regiones, Lazio, la de Roma, y Molise. En esta última por lo menos es porque se deben repetir las pasadas elecciones, celebradas en octubre de 2011. Aunque ha llevado más de un año decidir que se anulaban por vicios formales en las listas del centroderecha, que entretando había ganado y hasta ahora ha vivido en un Gobierno provisional, congelado e inútil.
En cambio en Lazio, la tercera región más grande, pasa como en Lombardía; el Gobierno del partido de Berlusconi se derrumbó por una oleada de casos de corrupción, personificados en Franco Fiorito, alias 'er Batman', el jefe de grupo que disponía alegremente de los fondos públicos destinados a cada partido. Cochazos, pisos, ostras, sobresueldos a todos los colegas parlamentarios... Pero en este caso las encuestas no ofrecen dudas. Berlusconi perdería de calle. Todos miran a Lombardía y las otras regiones grandes, Campania, Sicilia y Véneto.