Selena se hace mayor
Rompe con su angelical imagen de chica Disney y se desmelena con Vanessa Hudgens en 'Spring breakers'
Actualizado: GuardarSensuales, atrevidas, descocadas, picaronas. Un suerte de aspirantes a 'femmes fatales' de angelical mirada atrapadas en un juego que se les va de las manos y que les llevará a sumergirse en las cloacas de la sociedad de la mano de un turbio personaje (James Franco). De salvador se trocará en despiadado corruptor que acabará con cualquier atisbo de inocencia que aún pudiera anidar en estas cuatro jóvenes cuyo único pecado es querer pasárselo bien sin calibrar adecuadamente las consecuencias de sus acciones.
Ese es, grosso modo, el argumento de 'Spring breakers', una arriesgada película dirigida por Harmony Korine que llegará a la cartelera el 15 de marzo y que sirve para que dos de las más relumbrantes 'chicas Disney', Selena Gómez y Vanessa Hudgens, se despojen definitivamente de dicha etiqueta, ofreciendo su rostro más desmelenado y gamberro, por mucho que pueda escandalizar a algunos de sus fans y, especialmente, a los padres de estos. Esa fue, precisamente, una de las principales razones que les llevó a aceptar los papeles de Faith y Candy, las jóvenes que en compañía de Brit (Ashley Benson) y Cotty (Rachel Korine) deciden asaltar un restaurante con el fin de lograr el dinero necesario para financiar su escapada primaveral, ese 'spring break' que da título a la película.
«Soy actriz. Ese es mi trabajo y es lo que me gusta hacer», apuntó Gómez. «Me estoy haciendo mayor y vi que la película era una oportunidad perfecta para diversificar mi trabajo y crecer como actriz», agregó esta joven de 20 años. Gómez pone rostro a la que quizás sea la chica que más remordimientos muestra ante la tesitura a la que se ven abocadas las cuatro protagonistas de la película. «La razón por la que mi personaje vive esto como un dilema es que considera que es una situación demasiado peligrosa para ella», explicó la intérprete.
«Cuando leí el guion, me incliné de forma natural hacia el personaje de Faith. Me gustó que todas nos comportásemos como hermanas», añadió antes de elogiar a sus compañeras de reparto, que la hicieron sentirse muy «protegida» durante el rodaje. Vanessa Hudgens, por su parte, enfatiza la oposición de caracteres entre ella y su álter ego en la pantalla. «Candy siempre está buscando problemas. Yo soy todo lo contrario. Ella siempre quiere salir. Yo prefiero quedarme en casa y leer un libro».
Y ese buen rollo entre las cuatro actrices las ayudó durante un rodaje en el que Selena, Vanessa, Rachel y Ashley tuvieron que estar casi permanentemente en bikini, lo que ha dado pie a algunas bromas al ser interpeladas acerca de si estarían dispuestas a subastarlos para regocijo de sus seguidores. «Yo quiero quedarme el mío», puntualizó Gómez. «Pasé un poco de frío porque algunas escenas se tenían que rodar a las tantas de la madrugada», comentó por su parte Hudgens. Más en serio, Ashley admitió que se sintió «intimidada por la idea de llevar siempre el bikini». «Luego me di cuenta de que era normal. Todo el mundo lo llevaba», agregó.