Los ciberataques chinos ponen en jaque a Washington
NUEVA YORK. Actualizado: GuardarPrimero eran las grandes corporaciones estadounidenses, como Coca-Cola o Apple, a las que China quería robar sus secretos comerciales. Luego los grandes contratistas del Pentágono, como Lockheed Martin o el Grupo Chertoff. Últimamente, la infraestructura crítica, como los sistemas de control de tráfico aéreo o las redes eléctricas. Ayer, 'The Washington Post' advirtió que todas las instituciones de Washington que posean alguna información relevante sin clasificar deben asumir que han sido víctimas de los ciberataques chinos.
«Sabemos que países extranjeros y empresas barren nuestros secretos corporativos», dijo Obama hace dos semanas, sin nombrar al país ofensor, que niega las acusaciones. «Ahora nuestros enemigos también buscan la capacidad de sabotear nuestras infraestructuras y nuestras instituciones financieras. No podemos permitir que dentro de unos años miremos hacia atrás y nos preguntemos por qué no hicimos nada».
Con el Congreso bloqueado por la oposición, el presidente Obama ha tenido que limitarse a responder con una orden ejecutiva que manda reforzar la seguridad informática de la infraestructura crítica, pero expertos y políticos coinciden en que eso no será suficiente para detener la oleada de ataques.
«Ahora mismo China no tiene ningún incentivo para dejar de hacer esto», dijo Mike Rogers, presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Diputados. Así lo confirmaron también los expertos entrevistados por 'The Washington Post', a los que el rotativo preguntó cuáles son las instituciones penetradas por los ciberespías. «La respuesta habitual fue 'casi todas'», publicó ayer el periódico.