Un líder acusado de pedir «una devoción ciega y sectaria»

Pocas personas conocen tan bien a Julian Assange como Jemima Khan, quien hasta hace poco era una de sus más fieles colaboradoras. Fue precisamente ella quien contribuyó a pagar la fianza del creador de Wikileaks para su libertad condicional en Londres. Pero finalmente ha decidido apartarse de las filas del australiano tras constatar que pide a sus adeptos «una devoción ciega y sectaria». «Pude ver cómo tenía el poder de dar, incluso a los idealistas más lúcidos, la impresión de que estaban por encima de las leyes y libres de las críticas si seguían sus normas», aseguró Khan, hija del multimillonario James Goldsmith y exnovia del actor Hugh Grant. Incluso llega a equiparar a Assange con Ron Hubbard, el fundador de la Cienciología.

millones de euros ha gastado Scotland Yard en los últimos ocho meses en montar guardia las 24 horas frente a la embajada ecuatoriana en Londres, donde se refugia Assange desde el pasado junio.