ACUERDO CON RECORTE
Actualizado: GuardarDespués de 26 horas de negociaciones, la Cumbre de jefes de Estado y Gobierno acordó ayer, por primera vez en su corta historia, reducir un 3% el presupuesto de siete años (2014-2020) hasta 969.800 millones de euros, y quedará por debajo de la primera propuesta de la Comisión Europea, que fue de 1,03 billones. El acuerdo se ha alcanzado después de una dura batalla del primer ministro del Reino Unido, David Cameron, que insistía en la necesidad de aplicar medidas de austeridad, y la posición del presidente François Hollande, que defendía el aumento del gasto de la Europa de los 27 para ayudar a las economías que están en recesión.
El acuerdo establece una distinción entre los «compromisos», es decir, la cantidad máxima asignada a los siete años, por 960.000 millones de euros, y la cantidad que realmente se gastará, que se reduce en 34.000 de millones de euros (hasta 908.400 millones) ¿De dónde proceden los ajustes a la baja? En primer término y por su importancia, de los fondos que debían destinarse a los proyectos de infraestructuras transfronterizas, que inicialmente se consideraron que debían favorecer la creación de empleo. Los recortes de las partidas de gastos de la burocracia de Bruselas -que en conjunto solo representan el 6% del presupuesto global- no son de grueso calado. Francia ha luchado por el presupuesto agrario -lo que también le convenía a España- y aunque quedan algunos flecos resulta posible que en el extenso período de siete años esos recursos sufran un recorte en torno al 10%.
Para España era muy importante que pudiera participar en un fondo de nueva creación para crear nuevos empleos que frenen el paro juvenil, propuesto por el presidente del Consejo de Europa, Van Rompuy, de 6.000 millones de euros, de los que España recibirá 1.000 millones. Se temía que España terminara siendo un contribuyente neto de la Europa de los 27, pues la diferencia entre lo que recibía y pagaba disminuía cada año, hasta llegar a 3.700 millones netos recibidos en 2011.
De esta forma, gracias a la posición de Alemania a favor de los fondos de cohesión, y la de Francia por el presupuesto agrario, España puede terminar con un ingreso neto anual en torno a 1.500 millones de euros. Como en las elecciones, todos dicen haber ganado. Pero España lo ha hecho en posiciones claves para atajar el paro juvenil.