Rajoy anuncia otro «paquete de medidas» en presencia de Merkel
El presidente del Gobierno dará a conocer durante el mes de febrero nuevas iniciativas para fomentar el empleo, el crecimiento y el crédito
BERLÍN. Actualizado: GuardarEn plena tormenta política doméstica, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, aprovechó ayer su encuentro en Berlín con la canciller alemana, Angela Merkel, en el marco de la XXIV cumbre hispano-alemana, para anunciar un nuevo paquete de medidas para estimular el crecimiento, que dará a conocer este mes.
«Es nuestra intención presentar en el mes de febrero un amplio paquete de medidas para estimular el crecimiento, sobre todo, con el objetivo de conseguir crédito para las pequeñas y medianas empresas en nuestro país y luchar contra el desempleo juvenil», declaró el mandatario español durante la rueda de prensa posterior a su reunión con la canciller germana. Rajoy reiteró, al mismo tiempo, su intención de continuar en el futuro con sus políticas centradas en la reducción del déficit público y en las reformas estructurales.
El presidente del Gobierno se esforzó por hacer valer ante su anfitriona los avances logrados. Citó, entre otras, las sucesivas reformas energéticas, la liberalización de horarios comerciales y la reestructuración de la banca.
«Ya hay efectos positivos en la economía española, aunque es verdad que no se ve en lo más directo que vive el ciudadano, que es el desempleo o el nivel de vida o la capacidad adquisitiva, pero la reducción del déficit es una buena noticia y la balanza por cuenta corriente es otra buena noticia», subrayó el mismo día que se conoció que España ha batido por enésima vez el récord de parados. España -resaltó- tiene hoy una balanza comercial positiva respecto de la zona euro y «los mejores datos en el sector exterior desde hace treinta años».
Pero no fueron las mejoras incipientes, sino aquellos asuntos en los que la economía española cojea -la lucha contra el desempleo y la falta de crecimiento económico- los que centraron la cumbre hispano-alemana. Para cumplir los objetivos marcados, el presidente del Gobierno español insistió en que cuentan con tres instrumentos: la corrección del déficit público, donde según avanzó Rajoy, «se ha hecho un esfuerzo importante y donde va a haber una reducción del déficit estructural del 3,5%»; las reformas estructurales y la restructuración del sistema bancario.
Angela Merkel aseguró sentir un «gran respeto» y «admiración» por las reformas emprendidas por el Ejecutivo de Madrid y se mostró convencida de que esas iniciativas darán frutos positivos a futuro. «Estamos convencidos de que las reformas surtirán efecto», resaltó. Además, destacó que España y Alemania «quieren» tener una moneda común, pero para ello necesitan también tener unas «finanzas sólidas». Las medidas españolas demuestran, a sus ojos, que esa posibilidad «existe». La canciller resaltó también la «estrecha colaboración» y lo «unidos que estamos para solucionar los problemas».
Merkel aseguró que su gabinete es muy consciente del elevado desempleo que sacude España, en especial entre los jóvenes, algo que les «entristece». En ese sentido, la canciller destacó la importancia de la cooperación entre los ministerios de Trabajo y de Educación de los dos países, al efecto de explorar vías para fortalecer las relaciones en el marco de la movilidad europea o mediante proyectos conjuntos con las empresas alemanas en el campo de la formación profesional.
Exportaciones
Merkel aprovechó también la comparecencia conjunta en la Cancillería para tratar de zanjar el cruce de declaraciones en torno al papel que debe asumir Alemania de cara a la crisis de la zona euro a través de políticas de estímulo del crecimiento. «Hace poco el presidente del Gobierno dijo que Alemania también tiene que hacer una contribución a que el crecimiento económico en Europa vuelva a estimularse y estoy perfectamente de acuerdo con él», afirmó Merkel. «Sí, en Alemania ahorramos, pero de tal manera que no seamos al mismo tiempo, por así decirlo, malos socios, sino que también contribuyamos al crecimiento», comentó al tiempo que señaló que gracias a la reducción de impuestos se puede fomentar la demanda interna en Alemania, lo que también tiene una repercusión positiva en las exportaciones españolas, portuguesas o griegas.
«Esto significa que los alemanes tienen más dinero y pueden hacer vacaciones o comprar mercancías procedentes de otros países europeos. Esta es nuestra contribución», afirmó Merkel, quien reconoció que «soporta» las críticas sobre su política de ahorro porque también asume la responsabilidad de intentar fomentar el crecimiento en Europa. «Todavía tenemos que afrontar una difícil etapa donde cada uno debe contribuir, algo que también hacemos nosotros», aseguró.
Sobre las medidas «puente» a las que se refirió Merkel durante el reciente Foro Económico Mundial de Davos (Suiza), la canciller alemana recordó sus palabras y señaló que las reformas estructurales son «importantes e irrevocables», pero añadió que como el pueblo germano bien sabe por propia experiencia, lleva tiempo hasta que tienen efectos sobre el mercado laboral.