Un grupo de clientes afectados por el fraude de las preferentes (dcha.) se manifiestan para exigir su dinero. :: LAVANDEIRA JR / EFE
Economia

PP y PSOE pactan una salida para las víctimas de las preferentes

Una comisión decidirá el perfil del cliente engañado que acudirá al arbitraje y que podría recuperar hasta el 100% de lo invertido

MADRID. Actualizado: Guardar
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No será la panacea, pero las verdaderas víctimas de las participaciones preferentes, aquellos que puedan probar que compraron estos títulos sin saber realmente lo que adquirían, empiezan a ver alguna luz al final del túnel. Los grupos parlamentarios del PP y el PSOE han alcanzado un acuerdo, el primero que cierran en la legislatura, para marcar el camino a seguir por quienes, engañados en sus inversiones, o confiados de buena fe en los empleados bancarios de quienes escuchaban recomendaciones «durante toda su vida», claman ahora por unos ahorros que han visto evaporados.

Una comisión, liderada por la presidenta del supervisor de los mercados (CNMV), Elvira Rodríguez, e integrada igualmente por un alto cargo del Banco de España y por representantes de la secretaría nacional de Sanidad y Consumo y del Tesoro, establecerá el perfil del cliente que puede recurrir al arbitraje. Cuando una reclamación sea reconocida, el demandante puede llegar a recuperar hasta el 100% de la inversión.

¿Tendrán todos los compradores la condición de perjudicados? La comisión ahora pactada determinará las circunstancias que se aplicarán para realizar la criba de los afectados. Se trata de remitir al arbitraje a aquellos ahorradores que fueron engañados por una comercialización irregular, discriminándolos respecto de aquellos otros que se movieron con conocimiento de causa, y a quienes les tocará asumir los correspondientes riesgos. Hay casos claros de irregularidades, como aquellos donde el contrato no incorpora una firma válida, o cuando el suscriptor es menor de edad, o incluso disminuido psíquico. Más complicado será determinar si hubo engaño mediante la aplicación de los test de idoneidad, que reflejan edad, renta, profesión o la proporción de la renta reclamada respecto al patrimonio.

¿Cómo funciona el arbitraje? Lo establecieron las consejerías autonómicas con competencias en consumo. Inicialmente, fueron expertos independientes los que realizaron la criba de solicitudes. El ministro de Economía refrendó este procedimiento cuando afirmó, en comparecencia ante la Comisión correspondiente del Congreso de los Diputados, que un asesor privado se iba a encargar del filtrado de los supuestos que permitían intuir la existencia de malas prácticas en concreto en el caso de Bankia. El PSOE sugirió entonces encomendar esa tarea a la CNMV, y ahora ve recogida su propuesta.

¿Recuperarán los ahorradores la totalidad de lo invertido? Los compradores estafados recuperarán el nominal de sus ahorros, sin sufrir quita alguna, como aseveró el portavoz del PSOE en Asuntos Económicos, Valeriano Gómez. Cuestión distinta es el cobro de intereses. El fallo del arbitraje puede tener en cuenta las ganancias previas a la hora de determinar la compensación. En estos casos se aplicaría una quita por el importe correspondiente.

¿Qué son las participaciones preferentes? Son valores emitidos por una sociedad, que no participan en su capital ni tampoco tienen derecho de voto. Suelen ser perpetuos, es decir, sin plazo de vencimiento y con rentabilidad vinculada a la obtención de beneficios. El gancho con el que se ofertaron fue una elevada rentabilidad. Pese a tratarse de un instrumento complejo -un híbrido, en el lenguaje del sector-, se vendieron en las redes bancarias y en especial en las oficinas de las cajas, como depósitos.

¿Quiénes han resultado más perjudicados? Con la crisis, todos los propietarios de preferentes se vieron pillados, pero algunas entidades intentaron dar salida al conflicto para no ver deteriorada por la desconfianza su base de clientes. No hay que olvidar que fueron las redes de sucursales las que vendieron estos productos. Por eso algunos bancos o cajas ofertaron el canje por obligaciones convertibles, depósitos o acciones, es decir, por títulos de mayor liquidez. El perjuicio económico se vio atenuado en estos casos. Pero en las entidades nacionalizadas Bruselas impuso que los 'dueños' sufrieran un perjuicio económico a cambio de las ayudas percibidas.