Arias Cañete potenciará que la feria Fegasur sea «referencia nacional»
El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente visita Jerez donde anuncia que están próximos a cerrar un gran acuerdo con el sector lácteo
JEREZ. Actualizado: GuardarEl ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, aseguró ayer que desde el Gobierno van a estudiar cómo potenciar que la feria ganadera Fegasur, que organiza la Diputación Provincial de Cádiz, sea «de referencia nacional» tras los «importantes esfuerzos» realizados «sobre todo en el último año» para darle «mayor potencialidad» a este evento.
En declaraciones a los periodistas durante una visita al Centro Experimental Agrícola y Ganadero de Jerez de la Frontera, Arias Cañete se ha mostrado «favorablemente impresionado» por sus instalaciones, sobre todo, según ha destacado, «por lo que supone de apuesta por nuestras razas autóctonas», una tarea en la que las administraciones públicas «tienen que involucrase», dijo.
Así, destacó el papel de la Diputación gaditana al «defender», por un lado, las razas autóctonas y, por otro, al «colaborar» con el sector ganadero en el desarrollo de su sector en general. Al hilo, Arias Cañete explicó que existen, además, algunas razas «típicamente gaditanas» que han desparecido o están en peligro de extinción «como el cerdo dorado gaditano o el vacuno rubio gaditano» y por ello, ha instado a «apostar por su reconocimiento como razas autóctonas y como defensa de su patrimonio genético». En ese sentido, el ministro señaló que el Ministerio va a estudiar «todas las formas posibles» de colaboración con la Diputación de Cádiz.
También subrayó que estudiarán cómo potencias Fegasur, la feria ganadera que organiza la Institución provincial, «para que sea una feria ganadera de referencia nacional». «Se han hecho esfuerzos muy importantes, sobre todo en el último año, para darle mayor potencialidad a Fegasur y, por tanto, creo que vale la pena, visto la pujanza del sector gaditano y andaluz, que tengamos una feria en Andalucía ganadera de referencia, con futuras ediciones, mayor alcance, mayor participación y mayor éxito».
Durante la visita, el ministro aprovechó para avanzar que su departamento está cerca de cerrar un «importante acuerdo» sobre el sector lácteo que garantice la «sostenibilidad» de las explotaciones. Arias Cañete se mostró convencido de poder alcanzar un «gran consenso nacional» que evite que los productores perciban por el litro de leche un precio inferior al del propio coste de producción.
El responsable de Agricultura recordó que ya ha sido enviado un texto de acuerdo a la Comisión Nacional de la Competencia, «que ha introducido alguna modificación» y tras ello, se está «pendiente de casar las agendas para ver si tenemos un gran consenso nacional, de modo que al final haya una etiqueta que permita a los consumidores saber que con la compra de ese producto están contribuyendo a que haya un sector ganadero lácteo pujante en el medio rural», según agregó.
Por otro lado, en cuanto a la revisión del etiquetaje de caducidad, aseguró que, en estos momentos, se está «revisando» la norma de calidad del yogur, en función de los informes que ofrezca la Agencia Española de Seguridad Alimentaria «desde una doble óptica: si simplemente prorrogamos la fecha de caducidad, a la vista de que los estudios científicos nos indican que el plazo de 28 días que se venía aplicando puede ampliarse, o si sustituimos eso por el de consumo preferente, que es radicalmente distinto».
En otro orden de cosas, también mostró su convencimiento de que la nueva norma para la carne, el jamón, la paleta y la caña de lomo ibéricos pueda entrar en vigor en un plazo máximo de «seis meses».
En declaraciones advirtió en todo caso de que la entrada en vigor de la nueva normativa no depende en exclusiva del Gobierno, sino de la comisión interministerial que debe analizarla y, posteriormente, de la Comisión Europea.
El ministro ha reconocido la dificultad que entrañaba reformar una norma que afecta a un producto «tan sensible», pero entiende que después de «mucho diálogo» se ha alcanzado un punto de encuentro en el que «todo el mundo está razonablemente satisfecho».