FASE SUPERIOR DEL EUROESCEPTICISMO
AUTOR DE 'CAMERON. TRAS LA SENDA DE CHURCHILL Y THATCHER' Actualizado: GuardarEl anuncio de David Cameron de convocar un referéndum para 2017 sobre la permanencia de Reino Unido en la UE simplemente confirma que el euroescepticismo ha permanecido instalado como parte fundamental del corpus ideológico y programático del partido conservador, desde Margaret Thatcher hasta la actualidad. Como sucedió en las recientes negociaciones sobre la consulta en Escocia, el primer ministro ha optado por eliminar cualquier ambigüedad en la pregunta: «o dentro o fuera».
Desde su llegada a la dirección de los 'tories' y más tarde al número 10 de Downing Street, David Cameron trató de que el tema de la UE no monopolizara el mensaje de su partido, como había sucedido en los liderazgos precedentes de William Hague, Ian Duncan Smith y Michael Howard. Sin embargo, dio pasos más radicales que estos, que se tradujeron en la nada simbólica medida de abandonar el Grupo Popular Europeo y la creación en la Eurocámara del European Conservatives and Reformist Group.
Paralelamente, el euroescepticismo de sus compatriotas crecía, espoleado a nivel doctrinal e intelectual por el trabajo de 'think tanks' como el Bruges Group. Es previsible que a partir de este momento se alcen voces críticas por parte del partido laborista y que partan de una única premisa: David Cameron está aislando a su país. Sin embargo, sin desdeñar lo que de cierto pueda tener, un análisis riguroso de esta hipotética respuesta exige señalar que durante los Gobiernos de Tony Blair y Gordon Brown, el laborismo practicó un escepticismo encubierto, que se tradujo primero en no ratificar la Constitución Europea y después, en apostar por la 'Europa a la carta' en el Tratado de Lisboa.
En definitiva, David Cameron ha dado un paso más en el distanciamiento de su país con respecto a la UE. Con independencia del resultado del referéndum, difícilmente podrá escapar Reino Unido de «su condición» de 'awkward partner' (socio problemático).