«Dirigí 'El Hobbit' porque no quería que nadie más tocara el material»
El cineasta estrena el viernes la primera parte de una trilogía inspirada en la obra de Tolkien, de quien adaptó con éxito 'El señor de los anillos' Peter Jackson Director de cine
Actualizado: GuardarPeter Jackson regresa a la Tierra Media. Después de deslumbrar al mundo con 'El señor de los anillos', el director neozelandés se ha atrevido con 'El Hobbit', el preámbulo de la magistral obra de J. R. R. Tolkien. Jackson ha superado multitud de obstáculos -huelgas y problemas financieros y ecológicos- para rodar la nueva trilogía. Tanto grabó Jackson que las dos películas previstas se convirtieron en tres. Para la primera parte de 'El Hobbit', que se estrena este viernes, el realizador ha vuelto a contar con Ian McKellen para el papel de Gandalf, con Cate Blanchett como Galadriel y con Elijah Wood como Frodo. Pero la gran novedad es el inglés Martin Freeman, que da vida a Bibo Bolsón. Freeman es muy popular en su país gracias a sus personajes televisivos en series como 'The Office' o 'Sherlock'. Convenció a Jackson enseguida.
-¿Cómo se plantea otra trilogía después de haber grabado 'El señor de los anillos'?
-Nunca pensé en dirigir 'El Hobbit', y menos hacer tres películas. En principio queríamos hacer dos, pero teníamos material de sobra porque compramos los derechos para usar las 125 páginas adicionales que Tolkien escribió como apéndices y que en realidad son una extensión del mundo del libro. Hemos utilizado parte para dar forma a la historia de las dos primeras películas y luego hemos podido hacer una tercera. Sinceramente tenía muchas razones y todas buenas para no hacer 'El Hobbit', pero llegué a un punto en el que literalmente no quería que nadie tocara este material. Tenía que hacerlo yo.
-Pero, para llevar la novela al cine, ha retocado el tono de Tolkien. ¿Quería adaptarlo al público más adulto?
-Hay muchas dudas sobre el libro pero todo está en él. Como director quería hacer una serie de películas que pudieran verse todas juntas y si a un lunático se le ocurre ver todas de un tirón, verá en ellas el mismo tono de manera constante.
-¿Por qué consideraba importante encontrar un equilibrio entre las dos cintas?
-El humor y el encanto de 'El Hobbit' nace de los personajes. Tenemos al protagonista, Bilbo Bolsón, que es mas tímido a la hora de emprender una aventura que su sobrino Frodo. Tenemos enanos que muestran mucha personalidad y además una gran camaradería, como en la anterior trilogía.
Inmune a las modas
-¿Por qué apostó por Martin Freeman como protagonista de esta nueva aventura?
-Tenía claro que era él. Fíjate que cuando decidí que quería a Martin para el personaje de Bilbo organicé la producción en función del tiempo libre del actor. Bilbo es el personaje central de la historia y, en mi opinión, él era el único que podía interpretarlo.
-¿Qué supone para usted la obra de Tolkien?
-Este es un libro que en los setenta años que lleva publicado jamás ha pasado de moda. Lo han leído millones de personas de muchas generaciones y eso refleja la importancia de la historia. El contenido además es relevante para explicar lo que esta ocurriendo hoy en día.
-Y la historia también es un alarde tecnológico.
-Desde luego me interesa la tecnología. Utilizarla mejora el estilo visual de la película. El 3D es una técnica que lleva muchos años pero ahora ha dado un salto de calidad. Pero todo ha evolucionado. Si para 'El señor de los anillos' tuvimos que construir escenarios en miniatura para mostrar las estructuras arquitectónicas de la Tierra Media, en este caso hemos podido hacer todo con imágenes creadas por ordenador. Todo lo que habríamos tenido que construir entonces se puede hacer ahora con un clic. Hay cosas que ni en sueños pensé qué podría lograr. Ahora Gollum tiene mas músculos en su cara que hace doce años. Andy Serkis [el actor que le da vida] ha conseguido que esos músculos funcionen de forma sorprendente. El sistema facial del 'motion-capture' se ha vuelto muy sofisticado y Gollum es quien ha heredado la mayor parte de los avances.
-Con un presupuesto de casi 500 millones de dólares para las tres películas, ¿cuál ha sido el mayor reto con el que se ha encontrado?
-El reto financiero ha sido menor esta vez, pero teníamos la obligación de hacer un filme entretenido. He tratado de no competir conmigo mismo en 'El Hobbit'.