Litigar, cosa de ricos
Actualizado: GuardarLeo, no sin estupor, la posibilidad o no de que los menos favorecidos por la fortuna puedan litigar cuando se vean atropellados sus derechos fundamentales. Una prerrogativa que ampara la Constitución ( Art. 118): Justicia gratuita a quienes acrediten insuficiencia de recursos. Abunda el artículo sobre las tasas que habrán de satisfacer «cuando tengan que presentar una demanda o interponer un recurso». Un nuevo impuesto que sumar a la pléyade de los que ya soporta el sufrido ciudadano y que en sus variantes exigirían gozar de una buena posición económica. Suben alarmantemente las tasas sobre los litigios de divorcios, herencias, reclamación de indemnizaciones... Defienden los abogados, que ven la penosa situación en que se pueden ver muchas familias, la necesidad de mantener el derecho de tutela judicial efectiva. Protestaron por esta injusticia social y seguirán el empeño en lo que resta de año. Eso les honra y aplaudimos su postura.