Un rebelde camina hacia Sake mientras sus habitantes huyen. :: AFP
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El futuro de la rebelión congoleña se discute en la capital de Uganda

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La solución del conflicto congoleño se encuentra en la capital ugandesa. Desde el lunes, Yoweri Museveni, presidente de este país, se ha convertido en el anfitrión de los dirigentes de Kinshasa y Kigali, con los que ejerce labores de intermediación, y también recibió ayer a Jean-Marie Runiga, líder del ala política del M23. Además de reunir a los actores implicados en la crisis, la ciudad acogerá mañana una reunión de emergencia de los países que forman la Conferencia Internacional de la Región de los Grandes Lagos, formada por once Estados del África Central.

Los rebeldes han rechazado expresamente la solicitud de retirada de Goma, firmada por todos las autoridades desplazadas a Kampala. Además, mientras tienen lugar los contactos oficiales y secretos entre los dirigentes de los distintos países con implicación en el conflicto, la guerra continúa abiertamente al este de Congo.

El avance del M23, ahora autodenominado Ejército Revolucionario Congoleño, hace frente a la resistencia de las tropas regulares y sus milicias aliadas en torno a la ciudad de Sake, ocupada el miércoles por los sublevados y en apariencia recuperada ayer por el Gobierno. Las ONG advierten sobre el desplazamiento de miles de habitantes de las riberas del lago Kivu.

Los análisis políticos intentan desentrañar el verdadero significado de las declaraciones de intenciones de unos y otros en este velado juego por el poder en el codiciado territorio del coltán y los metales preciosos. A ese respecto, la escenificación diplomática parece disimular el intenso pulso que mantienen Joseph Kabila y Jean Paul Kagame, el presidente ruandés, hombre fuerte de toda la zona y presunto responsable último de esta ofensiva de los amotinados congoleños.

Así, las últimas manifestaciones del presidente de la República Democrática de Congo, que sugieren una voluntad de diálogo, aventuran el reconocimiento implícito de la impotencia gubernamental para solucionar el conflicto por la vía armada.