La lista VIP terminó de reventar el aforo
La SGAE no puede cuantificar la asistencia como prometió el Ayuntamiento porque los organizadores no le comunicaron la fiesta La Policía investiga correos para determinar cuántos invitados accedieron al Arena sin entrada
MADRID. Actualizado: GuardarLas continuas sorpresas sobre el aforo del Madrid Arena dejan perpleja incluso a la Policía. Los agentes ya sabían que centenares de jóvenes se colaron en el Thriller Music Park sin que nadie lo impidiera poco antes de que se produjera la avalancha mortal que terminó con la vida de cuatro chicas. Los funcionarios hace días que también tienen indicios de que una muchedumbre entró al recinto ya de madrugada con entradas falsificadas porque nadie escaneaba los códigos de barras. Los investigadores tienen en su poder desde el fin de semanas algunas entradas con números duplicados que habrían computado como una sola persona con vistas al aforo. La Policía desde el principio está convencida de que la organización vendió muchas más entradas de las 9.650 que asegura.
Pero a todas estas supuestas irregularidades todavía se suma una más: la Brigada de Homicidios sospecha que otra multitud entró por la puerta de atrás al macroconcierto con la aquiescencia de la organización y sin que en ningún momento su entrada se cuantificara o se limitara.
La Policía investiga cuántas personas entraron al Madrid Arena a través de la denominada lista VIP, un elenco de amigos e invitados del organizador, DivierTT S. L., que no habrían pasado ni por taquilla ni por los tornos ni por el recuento oficial de los asistentes. Los funcionarios afirman tajantes que esos 'vip' pudieron terminar del «reventar» el aforo de la fiesta. El eje central de la investigación sobre el aforo es el cruce de correos electrónicos entre varios supuestos relaciones públicas y la organización, pidiendo la inclusión de amigos en la lista.
Miguel Ángel Flores, el organizador del evento, es muy aficionado a esas listas VIP, que no pasan por taquilla ni por aforo. En Internet, explican los investigadores, son innumerables las ofertas para entrar en estos exclusivos elencos de invitados para la más conocida sala de Flores en Madrid, Macumba, eso sí, a cambio de un «precio a convenir». Una puerta de atrás, señalan los policías, que además de adulterar el aforo genera un movimiento de dinero opaco para Hacienda.
Las otras puertas
Seguriber, la empresa que se encargó de la seguridad perimetral, ya advirtió en un comunicado que sus empleados solo supervisaron algunos accesos, pero no estuvieron en «el control de entradas, petición de documentación y accesos por las puertas destinadas a organización y entrada de artistas», que «eran responsabilidad de la empresa» que contrató DivierTT y que no era una firma de seguridad homologada. Los funcionarios creen que fueron esos accesos VIP, cuyas cámaras de seguridad ya se están controlando, por donde entraron centenares de asistentes sin entrada.
El problema es que cuantificar el aforo de forma legal va a ser imposible, diga lo que diga el Ayuntamiento. Solo horas después de la tragedia, el concejal responsable del Madrid Arena, Pedro Calvo, aseguró que las dudas sobre cuánta gente había en la sala se despejarían porque la SGAE «reportaría» su informe sobre los asistentes. El problema es que la sociedad nunca podrá emitir ese documento porque, a pesar de ser preceptivo de que se le comunique cualquier evento en el que haya música a efectos recaudatorios, DivierTT no lo hizo.
Responsables de la SGAE confirmaron que incluso los promotores la más pequeña celebración tienen la obligación de comunicar a la sociedad el evento con un mes de antelación para que la entidad, si lo considera oportuno, envíe inspectores para calcular cuál es el canon a pagar según los asistentes y el repertorio. En cualquier caso, no era la primera vez que las empresas de Flores faltan a su cita con la SGAE, que tiene abiertos cuatro contenciosos contra el conocido empresario que organizó el evento.
El Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid recibió ayer el primer informe policial sobre los sucesos de la fiesta de Halloween. El juez Eduardo López, que en cuanto estudie ese atestado preliminar tiene previsto empezar con los interrogatorios, ordenó a la Policía que el precinto del Madrid Arena deberá mantenerse 'sine die'. El instructor tiene intención de realizar una exhaustiva inspección ocular en el recinto ante la marea de denuncias de irregularidades en materia de seguridad y teme que si se reabre el pabellón puedan alterarse pruebas.