El juez impone una fianza de 10,5 millones a exdirectivos de Novacaixagalicia
Aprecia «indicios de criminalidad» en la actuación de los acusados, que percibieron 7,87 millones de forma indebida
MADRID. Actualizado: GuardarEl juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha impuesto fianzas que suman más de 10 millones de euros a cuatro exdirectivos de Novacaixagalicia (la entidad nacionalizada fruto de la fusión de CaixaNova, y CaixaGalicia) acusados de embolsarse indebidamente 7,87 millones en concepto de prejubilaciones. En un auto publicado ayer, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 justifica la medida cautelar al existir «riesgo de que los querellados se coloquen en una situación de insolvencia que impida o dificulte que un eventual pronunciamiento condenatorio pudiera hacerse efectivo».
La fianza más cuantiosa se ha fijado para el exdirector general adjunto ejecutivo de Novacaixagalicia, Javier García de Paredes (7,02 millones de euros). Los exdirectivos Gregorio Gorriarán y Óscar Rodríguez Estrada deberán pagar 1,21 millones y 347.920 euros respectivamente, mientras que al exdirector general de Caixanova, José Luis Pego, se le ha impuesto una fianza de 1,92 millones. Además, el magistrado hace responsable civil solidario al copresidente de la entidad fusionada, Julio Fernández Gayoso. El impago de estas cantidades acarreará «el embargo de bienes de su propiedad en cantidad suficiente para responder de las sumas que se les reclama».
Todos ellos están imputados por un presunto delito de administración desleal o, alternativamente, de supuesta apropiación indebida. Según consta en la querella presentada por la Fiscalía Anticorrupción, los cuatro directivos modificaron sus contratos entre octubre y diciembre de 2010 para embolsarse 18,9 millones de euros por su salida del grupo, de los que deberán devolver 7,87 millones que percibieron presuntamente de forma indebida. El juez Moreno considera que existen «indicios racionales de criminalidad» en la actuación de los cuatro directivos que, «con la cooperación necesaria» de Fernández Gayoso, y «con ocasión del acuerdo de fusión» entre las dos cajas, «acordaron mejorar sus contratos de alta dirección con CaixaNova con menoscabo del patrimonio de la misma».
El auto del magistrado refleja cómo los acusados percibieron «elevadas sumas de dinero con ocasión del cese de sus actividades» en la entidad crediticia «con abuso de las funciones de su cargo y pleno conocimiento de la dificilísima situación económica» por la que atravesaba.
Además de por el peligro de que los imputados aleguen insolvencia económica, el juez justifica la aplicación de la fianza por la existencia «de un peligro por la mora procesal». Es decir, de la posibilidad de que los acusados eludan su presunta responsabilidad patrimonial «habida cuenta de que conservan tanto su capacidad de actuar, como la libre disposición de sus bienes».
'Caso Bankia'
Por otro lado, ayer prosiguieron las declaraciones de los imputados en el 'caso Bankia' que instruye el juez Fernando Andreu. Ayer fue el turno de Ricardo Romero de Tejada y de Mercedes Rojo-Izquierdo, así como de Ángel Villanueva, que había aplazado su comparecencia, prevista en un principio para el lunes.
La exasesora de Esperanza Aguirre aseguró ante el juez que recibió «con sorpresa» el anuncio de la dimisión de Rodrigo Rato, que dejó el cargo con el argumento de que «era lo mejor para todos», y que «había perdido la confianza del Ministerio de Economía». Según fuentes judiciales, Rojo-Izquierdo admitió en su declaración sus escasos conocimientos financieros (estudió la carrera de Farmacia, que no llegó a concluir), pese a formar parte del Comité de Auditoría del grupo BFA-Bankia.
Tanto ella como los otros dos imputados que prestaron declaración aseguraron que el proceso de aprobación y posterior reformulación de las cuentas correspondientes al ejercicio de 2011 (se pasó de un beneficio de 309 millones de euros a unas pérdidas de 2.979) les pareció «normal». «Tan correcto era dar unos beneficios de 300 millones de euros como unas pérdidas de 3.000», llegó a afirmar Romero de Tejada, exsecretario general del PP madrileño.