La enfermedad de Alaya paraliza la instrucción judicial
SEVILLA. Actualizado: GuardarLa comisión de investigación llega tarde para PP e IU. El caso de corrupción ya tiene un recorrido de año y medio en el Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla. Sin embargo, la investigación está paralizada por una dolencia de la magistrada Mercedes Alaya, que desde el pasado septiembre está de baja por una extraña enfermedad que le produce fuertes dolores de cabeza. Alaya fue ingresada el pasado lunes en una clínica privada y fuentes judiciales no saben cuando será dada de alta. Hasta su baja, la juez había imputado a 60 personas en un caso cuyo volumen de expedientes ocupa una habitación propia en el juzgado.
Alaya mandó en primavera a prisión preventiva sin fianza al exconsejero Antonio Fernández, al exdirector general de Trabajo Javier Guerrero y al chófer de este, Francisco Trujillo. Los tres han salido de prisión después de que la Audiencia Provincial la corrigiese y fijara una fianza para Fernández de 450.000 euros. El exconsejero salió en agosto tras reunir su familia el dinero. Trujillo lo hizo sin fianza. Y Guerrero en octubre, tras pagar 50.000 euros, después de que le fuera rebajada la cuantía por el juez sustituto, Enrique Iván Escalera.