Cada 'ni-ni' sale por 11.375 euros
Un informe de la Comisión Europea cuantifica en 153.000 millones el coste de este fenómeno para las arcas comunitarias Los jóvenes que ni estudian ni trabajan suponen una rémora del 1,47% del PIB
MADRID. Actualizado: GuardarAtrapados entre el fracaso escolar y un mercado laboral moribundo, los 'ni-nis' (jóvenes que ni estudian ni trabajan) no solo sufren dramas personales y sociales. También contribuyen, involuntariamente, a la crisis económica de España. Según un estudio de Eurofound, la agencia de la Comisión Europea encargada de velar por las condiciones de vida y de trabajo en el continente, cada 'ni-ni' español le cuesta 11.375 euros a las arcas del Estado. En total, los jóvenes que ni estudian ni trabajan suponen una rémora de 15.735 millones para la economía nacional, un nada desdeñable porcentaje del 1,47% respecto al conjunto de la riqueza nacional. Esta cifra tiene en cuenta los costes que supone este grupo en prestaciones por desempleo, en sanidad y en otros servicios sociales, pero también los ingresos que deja de percibir el Estado en impuestos, la ausencia de ahorro y consumo por parte de este grupo, así como su incapacidad para aportar al sistema de pensiones.
El fenómeno 'ni-ni' no es nuevo, pero sus efectos perniciosos se han multiplicado desde el principio de la recesión. La Comisión Europea incluye en su informe a todo el grupo de edad comprendido entre los 15 y los 29 años, así que incluye por lo menos a una parte de población, la que tiene 15 y 16 años, que está escolarizada obligatoriamente (además de a quienes siguen estudiando).
Pese a este 'atenuante', la tasa de 'ni-nis' en España, 1.643.928 en cifras globales, supone el 21,1% de la población, solo superada por Bulgaria (24,6%), Italia (22,7%) e Irlanda (22%). En el lado contrario, el de los países con menos jóvenes que ni estudian ni trabajan, se encuentran Holanda (5,5%), Luxemburgo (6,6%), Dinamarca (7,6%) y Suecia (7,8%).
El estudio sobre los 'ni-nis' compara los datos de 2008 con los de 2011, y en esta confrontación, España sale muy mal parada. Hace cuatro años, el coste de los 'ni-nis' (entonces se encuadraban en esta categoría 1.029.312 españoles) para el conjunto del PIB nacional era de 10.794 millones (0,99% del PIB). De esta manera se comprueba que en cuatro años de crisis, la carga ha aumentado un 50%.
En el conjunto de la Unión Europea, 13.941.264 jóvenes de un total de 94 millones no estudian ni tienen empleo. Globalmente, cuestan a las arcas europeas más de 153.000 millones de euros, un 1,21% del PIB comunitario, una cifra que ha aumentado el 45,77% desde 2008.
Desafección
La Comisión Europea encuadra a España en el mismo grupo que a Estonia, Irlanda, Letonia, Lituania y Portugal. Se trata de países que «han sufrido con mucha fuerza la recesión» y que han visto cómo «sus tasas de paro juvenil se han multiplicado por dos y hasta por tres». Exactamente eso ha sucedido en España, donde en 2008 el porcentaje de desempleo juvenil se situaba en el 24% y ahora se encuentra por encima del 51%.
Además, a diferencia de lo que sucede en otros países europeos, donde priman los jóvenes sin ninguna experiencia, la mayoría de los 'ni-nis' españoles sí ha trabajado en alguna ocasión. Por tanto, ha sido la crisis, no su falta de formación, la que los ha dejado fuera del mercado laboral.
Además de cuantificar el coste económico de los jóvenes que no estudian ni trabajan, el informe de Eurofound indaga en otros aspectos. «Los 'ni-nis' están sustancialmente menos comprometidos en cuestiones políticas que el resto de la población», asegura el documento. Este grupo vota menos (el 65% frente al 75% de los que estudian o trabajan), están menos interesados en política (28,7% frente a 40%) y hablan menos de política con sus amigos (52,8% frente 65%).
Más profunda aún es la sima cuando se abordan los índices de participación social e institucional. En el primero de los casos, el 46% de los que estudian o trabajan son miembros de algún tipo de asociación, en comparación con el 36,7% en el caso de los 'ni-nis'. A la vez, el 19% de los jóvenes activos están en organizaciones institucionales, en comparación con apenas el 9,6% de los 'ni-nis'. El estudio europeo concluye que los 'ni-nis' tienen un mayor riesgo de estar alienados política y socialmente.