Las Aletas, en el cajón del olvido

El proyecto de Las Aletas lleva ya más de dos años sumido en el cajón de los olvidos. Hasta hace bien poco, era el estandarte de la modernidad de la provincia, el gran plan que iba a relanzar a Cádiz como uno de los referentes nacionales y europeos a nivel industrial. De hecho, por fin parecía que todos los partidos políticos se ponían de acuerdo y hacían frente común en algo. Una idea que, según las previsiones, crearía la nada despreciable cifra de 30.000 empleos. Lo que a día de hoy, supondría acabar con el 15% del paro de la provincia.

Sin embargo, el proyecto sufrió un enorme varapalo tras la denuncia de los ecologistas, a los que la justicia daba la razón, y se paralizaban los trabajos al poco tiempo de entrar allí las máquinas y hacerse todos los políticos la foto de rigor.

Esto ocurría en septiembre de 2009. Y desde entonces hasta ahora, nada se ha hecho en los terrenos puertorrealeños. Los trámites para que se apruebe un nuevo proyecto compatible con el medio ambiente se eternizan y en la zona no afectada por la sentencia no se ha movido ni un metro cuadrado de tierra.

Ahora, el nuevo presidente provincial del Partido Popular, Antonio Sanz, ha retomado el asunto instando a la Junta de Andalucía a que, al menos, nombre a sus representantes en el proyecto. Porque no se trata simplemente de un asunto de trámites legales que haya que agilizar. Se trata de que, mientras la Justicia sigue su curso, se vaya adelantando todo lo posible. De manera que cuando se desbloquee el proyecto, de inmediato puedan iniciarse los trabajos. Sin embargo, desde la Junta de Andalucía no parece que este asunto vital se considere urgente, por más que pueda suponer un relanzamiento de la industria y la tecnología de la provincia.