FÚTBOL Y RESULTADOS

Ahora que vienen mal dadas en el Cádiz es fácil que vuelvan a sacar la cabeza los resultadistas. Son aquellos a los que les da igual como conseguir la victoria y que generalmente desprecian a los que prefieren lograr los objetivos haciendo disfrutar a su parroquia. Es obvio que cualquier aficionado quiere lograr el ascenso con urgencia, pero no se nos puede escapar que haciendo las cosas bien será más fácil lograr todo aquello que nos propongamos. Con ese discurso llegó Monteagudo y la mayoría se lo compramos. Al fin llegaba alguien al que le importaba el cómo y que esperaba conseguir que Carranza se lo pasase bien. Un entrenador que no iba a especular con el empate ni con el 1-0 a favor. A todo el mundo le entusiasma que su técnico prometa diversión, máxime cuando el técnico viene con el aval directo y total del máximo responsable del área deportiva. Pero ha pasado más de un mes de competición y nos queda mucho para ver lo que se nos dijo. Las intenciones son inmejorables pero los puntos se escapan y las distancias se agrandan.

El partido ante el Sevilla Atlético fue un horror. Lo vimos todos y, por suerte, cuerpo técnico y jugadores también lo apreciaron. «No hay excusas. Jugamos mal. No se puede repetir» se oía decir a los responsables del desaguisado. Al menos hay autocrítica y Monteagudo se lo dejó bien claro a sus hombres en la charla del lunes, que según me cuentan fue la más dura, dentro de la corrección, que ha dado a sus hombres desde que llegó.

Por ahora todos son palabras y la grada lo que requiere con urgencia son hechos. Otra cosa será ver si este es un equipo para luchar solo por entrar en ‘play off’ o si nos dan la sorpresa y al final arrebatamos el campeonato al Cartagena o al que sea. El equipo y su cuerpo técnico tiene que reaccionar ya, de lo contrario el se generará un ambiente difícil para recibir al Cartagena. Solo espero que no resucitemos al UCAM, que el Cádiz es experto en ‘ayudar’ al prójimo.