La reducción del déficit de las administraciones hasta el 6,3%, un objetivo cada vez más difícil

La reducción del déficit de las administraciones públicas españolas en 2012 hasta dejarlo en el 6,3% del Producto Interior Bruto parece un objetivo cada vez más difícil. La ejecución de las cuentas del Estado ya muestra una sensible desviación, que desde Hacienda se justifica con el argumento de que «las cifras de este año y el pasado no son homogéneas», para añadir que el desequilibrio «acabará por moderarse». Hasta el gobernador del Banco de España ha emitido comentarios dubitativos. «Habrá que ver», ha dicho, tras aconsejar al Gobierno que se piense muy bien si puede asumir el gasto -unos 3.000 millones de euros este año- de actualizar las pensiones.

El Ejecutivo de Mariano Rajoy confía en que el Eurogrupo manifieste cierta comprensión hacia los esfuerzos de España, incluso si no cumple, al enmarcarlos en el escenario de severa contracción que sugieren todas las instituciones internacionales. Mañana, el Fondo Monetario Internacional corregirá sus proyecciones a la baja.