La formación dual alemana ante el paro juvenil español
Las Cámaras de Comercio buscarán empresas españolas para implantar el sistema que combina trabajo y estudio
MADRID. Actualizado: GuardarSólo el 7,9% de los jóvenes menores de 25 años está en paro en Alemania frente a una dramática tasa de paro juvenil del 52% en España, la más alta de Europa después de Grecia. El sistema de formación profesional dual alemán, demandado por más del 60% de los jóvenes escolares germanos, es una de las principales razones de esa diferencia según los expertos. El presidente mundial de Siemens, Peter Löscher, aseguró ayer en Madrid que la formación dual «puede ser una solución a la alta tasa de desempleo juvenil». Ayer también las Cámaras de Comercio españolas y alemanas firmaron un convenio para impulsar la implantación de ese sistema en nuestro país.
En Alemania, a los 16 años, los estudiantes pueden apuntarse al sistema de formación profesional dual: dedican más de la mitad del tiempo a aprender mediante prácticas remuneradas en las empresas, entre 300 y 800 euros al mes, y cotizando a la Seguridad Social, y el resto del tiempo, normalmente uno o dos días a la semana, reciben clases teóricas. Al final de los dos o tres años que dura esta FP, alrededor del 78% de los jóvenes se queda a trabajar en la empresa. Las compañías alemanas y el Gobierno corren con los gastos, y los sindicatos apoyan el modelo. Con este panorama ¿quién no querría que este sistema se implantara en España?
El problema es que ni el modelo productivo ni empresarial es igual en ambos países. Empezando por el tamaño de las empresas. Para que el sistema de formación dual funcione hay que encontrar un puesto en una empresa para cada uno de los alumnos. En España, en el último año escolar había 613.170 alumnos matriculados de FP de grado medio y superior. Mario Rodríguez, coordinador de la secretaría general de formación de UGT, explica que no les parece mal una formación profesional compartida pero que eso requiere unas dimensiones mínimas empresariales para que puedan soportar una estructura de formación y garantizar una tasa de inserción. En España, el 55% de las pymes no tiene asalariados y el 26% sólo tienen uno o dos trabajadores. Hay que tener en cuenta que la empresa que contrata a los jóvenes en calidad de aprendices debe contar con una maestro o tutor que forme al alumno. «Es inviable la aplicación generalizada para los 600.000 alumnos», señala Rodríguez, «lo que no significa que no se pueda implantar en algunos sectores o zonas o introducir una modalidad de formación dual dentro del sistema de FP». Actualmente, en Alemania hay más de 500.000 centros de trabajo que imparten formación dual.
Las Cámaras de Comercio identificarán las empresas que pueden acoger a jóvenes en formación y darán una formación pedagógica a los tutores de cada empresa, según explica el presidente del Consejo Superior de Cámaras, Manuel Teruel. El objetivo es iniciar cuanto antes experiencias piloto en las comunidades autónomas. «No podemos permitirnos el lujo de perder a la generación de los jóvenes. La sociedad los necesita», asevera Teruel.
En el País Vasco se llevó a la práctica un sistema parecido en la década de los noventa y en 2007 repitieron la experiencia. Pero duró pocos años y la crisis laminó las ofertas empresariales. Ahora, Seat va a implantar a partir de este curso un sistema similar al de Alemania. La filial del grupo Volkswagen abonará una remuneración mensual a todos los alumnos: 250 euros al mes el primer curso; 400, el segundo; y 530, el tercero.