Ruiz-Mateos culpa a la jueza de posibles daños en su salud

José María Ruiz-Mateos abandonó ayer sobre las dos de la tarde la comisaría de Pozuelo de Alarcón para ser trasladado al aeropuerto de Barajas y emprender viaje a Palma, llegando a las 18.00 horas a la Jefatura Superior de la Policia de Baleares en un coche policial. El patriarca de la familia «responsabiliza jurídicamente» a la juez titular de este Juzgado y a la Policía de las «adversidades» que deriven de la demora de este traslado.

«Se responsabiliza jurídicamente a la juez y a la Policía de las adversidades derivadas de la demora, habida cuenta del antecedente de daños en su salud que Ruiz - Mateos tuvo que soportar en pasada fecha reciente», señala el portavoz del empresario, Ignacio Fernández, en un comunicado. Ruiz-Mateos fue detenido en la mañana de ayer en su domicilio de Somosaguas y posteriormente fue trasladado a la comisaría de Pozuelo. Se trata de su segunda detención en una semana, que se registra después de que el pasado lunes la jueza de refuerzo del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, María Pascual, ordenara la «búsqueda y detención inmediata» del fundador de Nueva Rumasa y su puesta a disposición en este Juzgado en horas de audiencia (por la mañana).

La jueza emitió esta orden después de que el empresario jerezano no compareciera el pasado jueves en la causa que tramita este juzgado por un supuesto delito de estafa de 13,9 millones de euros en la compraventa de un hotel de Palma de Mallorca.

Durante su arresto, agentes de la comisaría de Pozuelo de Alarcón condujeron a Ruiz- Mateos, de 81 años, a un centro sanitario, ya que el empresario se ha acogido a su derecho a solicitar asistencia médica en el transcurso de las diligencias, según las mismas fuentes.

Su abogado, Ignacio Fernández Candela ha subrayado que la familia espera que, una vez que haya declarado hoy ante el juzgado de Palma, sea puesto en libertad cuanto antes.