El Supremo confirma la condena de un año y 11 meses a María José Campanario
La sentencia de la 'Operación Karlos' desestima el recurso del abogado de Campanario. Casto y Carretero no podrán eludir la prisión
CÁDIZ. Actualizado: GuardarEl Tribunal Supremo confirmó la sentencia de la Audiencia Provincial de Cádiz que condenó a María José Campanario, esposa del torero Jesulín de Ubrique, y a su madre, Remedios Torres, a un año y once meses de prisión dentro de la 'Operación Karlos'.
El Tribunal Supremo confirma así el fallo de la operación con una sentencia en la que rechaza los recursos presentados contra la misma por el abogado de Campanario y su madre.
Ambas fueron condenadas en 2011 a un año y once meses de cárcel por falsedad de documento oficial y tentativa de estafa al intentar lograr una pensión de la Seguridad Social para la segunda de ellas.
El Supremo también confirma la condena para el inspector médico Francisco Casto Pérez-Lara, quien se llevó la condena más abultada, de nueve años y medio de cárcel.
Al hacerse firme la sentencia, las condenas deben ejecutarse, aunque esto no significa que María José Campanario ni su madre vayan a ingresar en prisión, ya que, al no tener antecedentes penales, podrán eludir su cumplimiento, a no ser que en el periodo de dos años alguna de las dos volviese a cometer un delito, caso en el que tendría que cumplir la nueva condena más la de esta sentencia.
Quien no podrá ahora eludir su ingreso en prisión, ya que la condena supera los dos años de prisión, es el inspector médico Francisco Casto Pérez-Lara, principal condenado junto con el exjefe de la Policía Local de Ubrique, Carlos Carretero, que en el juicio, como otros 14 acusados, llegó a un pacto con la Fiscalía por el que vio reducida su condena a cuatro años de prisión.
Según las fuentes jurídicas, el Tribunal Supremo rechazó los cinco motivos que incluía el recurso de Campanario y su madre, que, entre otros, alegaba que se había alterado su presunción de inocencia, así como los cuatro que interpuso el abogado de Casto Lara.
La sentencia de la Audiencia Provincial de Cádiz por la 'Operación Karlos' se hace así firme cuando se cumple un año desde que fuera dictada, el pasado 11 de julio, y tras un largo juicio que se prolongó durante dos meses y que sentó en el banquillo a 25 personas.
La sentencia consideró probado que Carlos Carretero era el cabecilla de una trama que tramitaba pensiones de invalidez de forma fraudulenta con la ayuda del inspector médico Francisco Casto y de la que se habían beneficiado más de una veintena de personas.
María José Campanario y su madre sostuvieron en el juicio que recurrieron a Carretero por recomendación de un amigo común que les dijo que Remedios Torres tenía derecho a una pensión de invalidez y que el exjefe policial podía tramitarla. Campanario pagó a los supuestos gestores 9.000 euros por los trámites. Pero el tribunal cree que ambas sabían que los trámites se estaban haciendo de forma fraudulenta.