El FMI estima que España seguirá en recesión durante 2013
El déficit fiscal rondará este año el 7%, por lo que el país volverá a incumplir las exigencias de Bruselas, según el organismo
NUEVA YORK. Actualizado: GuardarTras el escepticismo con que los mercados han recibido el tijeretazo de 65.000 millones de euros del Gobierno y el plan de rescate de la banca ideado por Europa, el Fondo Monetario Internacional (FMI) se descolgó ayer con un último mazazo a la economía española al revisar sus propios pronósticos -hasta ahora los menos pesimistas en el plano internacional- que hablaban de una lenta salida del túnel a partir de 2013.
Lejos de crecer un 0,1 % como había previsto el pasado abril, España tiene un largo camino por delante para dejar atrás la recesión, con un retroceso estimado del 0,6% el próximo año. Para el actual ejercicio, el Fondo matiza que la caída del PIB será del 1,5%, tres décimas menos de lo anunciado en su anterior informe. En medio del baile de cifras negativas, el informe Perspectivas Económicas Globales sitúa por primera vez de manera explícita a las economías española e italiana como los dos grandes obstáculos que lastran el crecimiento de la economía mundial.
La institución presidida por Christine Lagarde se apresuró a subrayar que sus proyecciones no han tenido en cuenta las recientes medidas implementadas por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, aunque los mensajes lanzados por un alto ejecutivo del organismo no son especialmente optimistas. «Las estimaciones preliminares apuntan a que ese ajuste adicional reducirá en cierto modo el crecimiento», con repercusiones a lo largo de todo 2013, aseguró Thomas Helbling, director del área de investigación.
En cualquier caso, el FMI ha prometido un nuevo informe a finales de mes, donde sí contemplará las últimas variables introducidas por Madrid y Bruselas. Si se consolida la idea de una España en recesión durante un largo periodo, la situación se revela como «una grave amenaza que descarrilar fácilmente la economía mundial», declaró en otro momento Olivier Blanchard, el economista jefe del FMI.
El organismo también ha revisado sus previsiones de déficit para España, y vuelve a modificar las datos anteriores. Para 2012 augura una reducción desde el 8,9% de 2011 al 7 % (un empeoramiento de un punto respecto a la previsión de abril), mientras que para 2013 estima un descenso hasta el 5,9 % del PIB.
Aún así, estos datos sitúan el déficit español para este año por encima del 6,3% exigido por los socios europeos, mientras que el correspondiente a 2013 también excede el 4,5% de déficit marcado como escalón previo al objetivo del 3% en 2014, año extra concedido por los ministros de Finanzas del euro. En cuanto a las proyecciones para la zona del euro, el Fondo mantiene la previsión de contracción del 0,3% en 2012, y rebaja dos décimas el crecimiento esperado para 2013, que se situaría en el 0,9%. Esta rebaja de las cifras para el próximo año también afectará a Alemania, cuyas previsiones de crecimiento ese año pasan del 1,4 al 1,3%. La locomotora europea, sin embargo, cerrará 2012 con una expansión del 1%, cuatro décimas más que lo pronosticado en abril. Francia mantendrá un crecimiento del 0,3% en el período 2012-13, mientras que Italia, en el furgón de cola con España, seguirá en recesión, con una contracción del 1,9 % este año y del 0,3 %, el próximo.
Las tensiones en la zona euro son la principal causa de estrés de la economía mundial, de ahí que la institución también recorte el crecimiento una décima menos de lo previsto: un 3,5% en 2012 y un 3,9% el año que viene. Los síntomas de debilidad mostrados por Brasil y China en los últimos meses también empiezan a pesar de manera importante. A Estados Unidos, el Fondo le estima un crecimiento del 2% este año y del 2,3% en 2013.
Sube la prima, baja la bolsa
Ni la subida del IVA, ni el golpe a funcionarios. Nada vale a los mercados, que ayer castigaron de nuevo a España. El Ibex cedió un 1,99% hasta los 6.532 puntos, mientras la deuda prosiguió su descalabro en el mercado secundario, y la prima de riesgo escaló hasta los 558 puntos básicos, 18 más que en la apertura, con el bono a diez años en el 6,817%. No hay tregua. En este caso -siempre hay una razón que desvirtúe los esfuerzos que se le imponen al país-, la culpa aparente la tuvo el informe del FMI. En este escenario tan adverso, el Tesoro se enfrenta hoy de nuevo a los inversores, pues tiene convocada una nueva subasta de deuda pública. El organismo dependiente del Ministerio de Economía intentará hasta 3.500 millones en letras a 12 y 18 meses.
Ayer, como tantas veces, el sector financiero fue el gran damnificado en la Bolsa. Con Bankia en caída libre (más del 6%), Santander cedió un 3,32%; BBVA, un 3,11%; Bankinter, un 2,7% y Popular, un 2,6%. En el resto de Europa, los principales parqués cerraron planos o con muy ligeras pérdidas.