Artículos

Límite de velocidad

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

A ver quién les ha dicho a los responsables de la Dirección General de Tráfico que tienen que hacerse notar. Digo DGT por la costumbre, aunque quizás ya se llame de otra forma, algo así como Agencia Estatal de Viabilidad, que no consigo estar al corriente de tanto cambio de nombres. Los responsables de la DGT han decidido que hay que cambiar algo, que se note que ellos pasan por allí y, así, se aprobó ayer, se aprueba hoy o se aprobará mañana que la velocidad máxima por las carreteras secundarias baje de 100 a 90 kilómetros por hora, aunque no quede claro si es en las carreteras secundarias con arcén o sin arcén. Una de las constantes de los cambios es que éstos no queden claros hasta su publicación en el BOE (si sigue llamándose BOE).

La causa de la bajada de la velocidad en las carreteras ha surgido tras un estudio que aconsejaba subir la velocidad en las autovías, que a lo mejor también se sube, pero que tampoco está claro. Recuérdese que ayer la velocidad máxima en autovías se redujo a 110 kilómetros por hora por la DGT de entonces, que a lo mejor se llamaba de otra forma. Los 110 vinieron después de un sesudo y caro estudio técnico que así lo aconseaba, probablemente el mismo estudio que ahora aconseja elevarla a 130.

Casi todo funciona así. Lo que dice el Supremo lo desmiente el Constiucional, lo que afirma Montoro lo contradice De Guindos, lo que ayer era bueno, hoy es malo; sin precipitarse, mañana será bueno. No hay mañana sin sorpresa, sector sin susto, ni información sin sobresalto. Son también el BCE, los mercados o Alemania, pero son mucho peores los ataques internos. Líbrenos Dios de nuestros amigos. Viene a la memoria con excesiva frecuencia la frase atribuida a Cánovas: español es quien no puede ser otra cosa. Estamos en ello.

España galopa demasiado deprisa a golpe de leyes, decretos y cambios de reglamento. Provisionalidad permanente. Como si no supiera dónde va. Quizá el límite de velocidad haya que ponérselo a España antes que a los automovilistas.