DEL BOSQUE BENDICE A SUS DOCE APÓSTOLES
La exigencia de la Eurocopa ha obligado al seleccionador a ceder toda la responsabilidad a un reducido grupo de elegidos
Actualizado: GuardarLa Eurocopa disputada por España se resume de momento en solo doce futbolistas. Son los discípulos bendecidos por Vicente del Bosque, a quien la exigencia del torneo, con el duro examen inicial ante Italia y la necesidad de puntuar ante Irlanda y hoy ante Croacia, ha obligado a ceder toda la responsabilidad a un reducido grupo de elegidos y le ha cerrado la opción de abrir las alineaciones a otros nombres. El esquema ha variado, pero las piezas no. Excepto Jesús Navas, que dio otro aire al equipo en la segunda parte en el estreno ante la escuadra 'azzurra', los minutos de Javi Martínez y Cazorla fueron irrelevantes. El peso de la competición ha recaído en doce apóstoles llamados a extender el mensaje de los campeones en Polonia y Ucrania.
El capitán es un seguro de vida. En el partido ante Italia estuvo excepcional y sacó varias manos de mérito que permitieron a la selección sumar un punto en el debut. El paradón que le hizo a Motta al filo del descanso está al alcance de muy pocos y demuestra que el meta del Real Madrid ha llegado en forma a la Eurocopa. Lo necesitarán sus compañeros, conscientes de que un buen porcentaje de los títulos continental y mundial se lo deben a él. La República de Irlanda prácticamente no le exigió. A día de hoy, Casillas es intocable para Del Bosque. Su baja, no obstante, estaría bien cubierta por Valdés y Reina, siempre a la espera de una oportunidad.
Su debut ante Italia fue nefasto, probablemente porque está algo fuera de forma. Le ganaron la espalda una y otra vez y la circulación de balón de España perdía precisión y velocidad en cuanto el lateral salmantino participaba en las acciones de ataque. No llegó a meter ni un centro al área. Sin embargo, es un fijo para el seleccionador, que valora sus cualidades defensivas, su compromiso y su colocación. Ante los irlandeses se especuló con la posibilidad de que el técnico le dejara en el banquillo para buscar una mayor profundidad con Juanfran, que no se ha estrenado en el torneo. Sin embargo, los galones primaron y Arbeloa volvió a ser titular. En el segundo partido estuvo algo mejor.
El central del Barça es fundamental en el esquema de España, necesitada de un defensa de calidad que juegue bien la pelota para conectar con el centro del campo y para ofrecerse como una solución en caso de que la circulación se atasque y haya que empezar de nuevo. Acostumbrado a ser la pareja 'oficial' de Puyol tanto en su club como en la selección, está en pleno proceso de adaptación a las características de Sergio Ramos. Ante Italia sufrió en varias fases y Di Natale le ganó la espalda antes de hacer el gol. Ante Irlanda emergió el Piqué poderoso. Ganó numerosos balones de cabeza y tuvo una buena oportunidad para marcar a la salida de un córner.
Al margen de las chanzas en los foros sociales por su equivocación en el resultado ante Eire en Facebook, lo cierto es que al madridista se le ve centrado y motivado. Lateral derecho en competiciones anteriores, 'La Roja' gana ahora con él como central. Contra los italianos estuvo bien en líneas generales, pero cometió un grave error que pudo terminar en gol si Balotelli, que le había robado la cartera, no se hubiera dormido en un uno contra uno con Casillas. Ramos no esperó a ver qué sucedía, sino que reculó y pudo quitarle la pelota al potente delantero de origen ghanés.
Le pudo la responsabilidad en el partido ante Italia, su estreno en una gran competición. Maggio, carrilero del Nápoles, trajo por la calle de la amargura al lateral izquierdo del Valencia con horizonte azulgrana en la primera parte, en la que se limitó a defender y no pudo prodigarse en ataque, uno de sus fuertes. Sin embargo, fue de menos a más y se quitó los complejos en el tramo final del partido, en el que buscó mayor profundidad y combinó con Iniesta y Xavi. La exigencia en la retaguardia fue mucho menor ante los irlandeses, lo que le permitió irse arriba con descaro y convetirse en un interior durante varias fases del choque. Es lo que le pide Del Bosque.
El pivote es irreemplazable para el seleccionador, que encuentra en él el equilibrio táctico que debe tener un equipo que juega con tantos futbolistas por delante del balón. No estuvo fino sin embargo en su estreno ante Italia en el entonces lamentable césped del Arena Gdansk. No tanto desde el punto de vista posicional, en el que no falla casi nunca, sino en sus apoyos para la salida del balón. Estuvo desacertado en las entregas y provocó alguna que otra contra de los transalpinos. Del Bosque recuperó ante Irlanda su mejor versión. Bien colocado en todo momento, se asoció a la perfección con Xabi Alonso y conectó con la zona de creación.
Encarna como nadie al futbolista comprometido y entregado a un objetivo. El tolosarra ha llegado fatigado a la Eurocopa, pero suple el desgaste físico con una colocación y una sobriedad extraordinarias. El técnico le considera insustituible por las mencionadas virtudes y por su capacidad para oxigenar al equipo con sus precisos envíos de larga distancia cuando hay cierto atasco en el centro del campo. Sus aperturas a los laterales son un excelente recurso para romper las líneas enemigas cuando no hay espacios. Es, además, el único futbolista de 'La Roja' capaz de sorprender a los porteros con disparos desde fuera del área. Contra Italia estuvo a punto de marcar de esa manera.
Es el faro de 'La Roja', el termómetro de los campeones de Europa y del mundo. Si alguien es insustituible es él, a pesar de que al seleccionador le hubiera gustado dosificarle por la carga de partidos en una temporada en la que ha estado siempre entre algodones. En el duelo ante los italianos, en el que Cesc hizo de falso '9', jugó un poco más adelantado y, aunque tuvo destellos de su inmensa calidad, nunca llegó a encontrarse cómodo. Sin embargo, ante los irlandeses, ya con un delantero puro, se salió. Su acierto en los pases rozó el 90% y tuvo en todo momento el control del choque, en el que movió a sus compañeros con su habitual destreza.
Ha llegado en un estado de forma inmejorable a la cita continental. Ha sido el protagonista de una de las fotos de la Eurocopa. En la imagen, aparece con el balón pegado a la bota y rodeado de cinco futbolistas italianos que no saben cómo cerrarle el camino, como si de una danza se tratara. El manchego fue de menos a más durante la temporada y eclosionó en el tramo final. Autor del gol en la prórroga ante Holanda que dio a España su primer Mundial, es el líder discreto, pero hay pocos como él en su puesto. Está fresco, y se nota. Ha recuperado sus vertiginosos cambios de ritmo y no duda en encarar al rival siempre que recibe. Imprescincible.
El Manchester City le fichó por su capacidad para dar el último pase, y no se equivocó. Es increíble la visión panorámica que tiene el canario cuando se mueve en las proximidades del área. La asistencia que le dio a Cesc para que empatara ante Italia es prodigiosa por su rapidez y precisión. Con la dificultad añadida del estado del césped, lento hasta la desesperación. Silva tuvo un protagonismo secundario en el Mundial de Sudáfrica, en el que jugó el primer partido ante Suiza y desapareció. Luego se quejó públicamente por ello. Del Bosque gestionó bien aquella crisis personal y ahora tiene claro que es uno de los elegidos. Su gol ante la Irlanda define su calidad.
Nadie se esperaba que fuera titular en el debut de España en el torneo. Ni siquiera él, que aseguró que había sido el primer sorprendido con su concurso. Jugó de falso '9', lo que avivó el debate sobre el sistema adecuado para 'La Roja'. El experimento no salió bien del todo, pero logró el gol de la igualada ante Italia tres minutos después del de Di Natale. Lo marcó al límite, justo antes de ser sustituido. El todo o nada define su carrera. «Ya tengo edad para asumir responsabilidades en la selección», dijo la víspera del choque ante Irlanda. Salió desde el banquillo y no le gustó. Enrabietado, metió un golazo, el cuarto, su segundo en la competición. Es, sin duda, el tapado.
Del infierno en los últimos veinte minutos ante Italia, en los que falló dos goles cantados y desmostró una preocupante falta de confianza, al cielo ante Irlanda, choque en el que marcó por partida doble y aprovechó el primer balón que cazó. Complicado describir lo que ha ocurrido con Torres. Tras firmar una campaña mediocre con el Chelsea, arreglada en parte en el último mes, Del Bosque no lo dudó y le convocó para la Eurocopa. Siente predilección con el 'Niño', quien ha admitido que en distintas etapas del curso se vio fuera de la cita de Polonia y Ucrania. Se la jugó el técnico al darle la titularidad en el segundo encuentro y el madrileño no falló. Imprevisible.
Jesús Navas es el que más se acerca al grupo de los discípulos de Del Bosque. Su partipación en la segunda parte ante Italia fue vital para que la selección recuperara sus esencias. Apuntó a la titularidad contra Irlanda por la necesidad de hacer daño desde los costados, pero el seleccionador apostó por aplicar las jerarquías. Javi Martínez también tuvo unos minutos ante Eire. Jugó en el centro del campo y bastante adelantado a pesar de que en los entrenamientos siempre lo hace de central. Cazorla, por su parte, salió en la parte final ante los irlandeses. Tuvo poco tiempo para demostrar su inmensa calidad.