LA SUERTE DEL CAMPEÓN

El domingo tuvimos mucha suerte. Dice un principio futbolístico que quien va a empatar un partido, lo acaba perdiendo. Nosotros fuimos a empatar y lo conseguimos. No podemos pedir nada más.

Bueno, siendo un poquito exigentes, creo que jugándonos el ascenso se podría pedir que el equipo tirara a puerta al menos una vez. Cero disparos contra el Albacete, casi ninguna oportunidad, y un nuevo planteamiento defensivo.

Muy bien Auslestia, hizo dos paradas que salvaron dos goles, porque, a pesar de que nuestro entrenador dijo en rueda de prensa que primó la seguridad defensiva, el Albacete tuvo oportunidades claras. Mejor todavía Goiko, el mejor del partido.

Viendo su actuación del domingo y las de Baquero en el último tercio de liga y en los 'play off', muchos nos preguntamos cómo puede ser suplente en este equipo.

Del resto, poco que decir. Juanjo desapercibido, pero ni el mejor Messi triunfaría en este equipo como delantero centro. El equipo juega al patadón, no crea y por tanto, a un rematador como él, no le llegan balones.

Más preocupante fue el bajón físico de la segunda parte, sobre todo en el centro del campo, donde no se dieron dos pases seguidos. ¿Será por el cansancio o por la falta de costumbre de dar dos pases seguidos? Las bandas solo existieron con un Ikechi desafortunado.

A mí, a diferencia de nuestro entrenador no me gusta el 0 a 0, porque cualquier empate con goles te deja fuera, y si nos adelantamos en el marcador, me imagino que como todo el año nos echaremos para atrás con el riesgo que eso conlleva.

El sábado tendremos el desenlace. No sé que pasará, pero lo que es seguro es que el Estadio estará lleno. La afición, a diferencia del equipo, no falla nunca, es el mejor patrimonio del club.