Los Hermanos Musulmanes buscan apoyos para descalificar a Shafiq
Mursi, candidato de la cofradía a la presidencia de Egipto, quiere aislar a su rival, ex primer ministro, pactando con varios partidos
EL CAIRO. Actualizado: GuardarMohamed Mursi, el candidato presidencial de los Hermanos Musulmanes, y varios de los aspirantes eliminados en la primera vuelta intentan aprovechar la ola de indignación que se ha producido en Egipto tras conocerse la sentencia del juicio a Mubarak para impulsar la descalificación del ex primer ministro Ahmed Shafiq. La cofradía y varios grupos de jóvenes revolucionarios piensan volver hoy a la plaza Tahrir para mantener la presión sobre los gobernantes militares y exigir un nuevo juicio contra los dirigentes del antiguo régimen acusados de matar a manifestantes durante la revolución.
Mursi se reunió ayer con el naserista Hamdin Sabahi, el islamista moderado Abdelmoneim Abul Futuh -que quedaron tercero y cuarto, respectivamente, en la primera vuelta de los comicios- y con el abogado de derechos humanos Jaled Ali (séptimo) para intentar aunar esfuerzos sobre las nuevas demandas de la plaza Tahrir.
Consiguieron ponerse de acuerdo en pedir que se vuelva a juzgar a Mubarak y a sus colaboradores y en exigir que se impulse la «Ley de Aislamiento Político», según explicó a este diario Ahmed Maher, portavoz del movimiento 6 de abril, que se entrevistó con los candidatos tras la reunión. Esta norma, que aprobó el Parlamento el mes pasado y que actualmente revisa el Tribunal Supremo, impediría a los antiguos altos cargos del régimen presentarse a los comicios, por lo que Shafiq quedaría fuera de juego.
Denuncian irregularidades
Los candidatos no consiguieron, sin embargo, pactar una de las peticiones que se han escuchado en los últimos días en la plaza Tahrir: la creación de un consejo presidencial interino que asumiría el poder y suspendería las elecciones. Según Maher, Mursi prometió reflexionar sobre ello y volver a reunirse con los candidatos, pero parece poco probable que la cofradía, probablemente el grupo que más se beneficiará de este nuevo despertar revolucionario que ha agitado el veredicto de Mubarak, acepte boicotear unas elecciones que tienen muchas posibilidades de ganar.
Tanto Sabahi como Abul Futuh y Ali denunciaron ayer también irregularidades en los comicios a favor de Shafiq que, según ellos, invalidarían la primera vuelta. Los excandidatos aseguran que se inutilizaron hasta 1,5 millones de votos. Sabahi, que obtuvo un 20% de los sufragios, se vería más directamente afectado por estas supuestas irregularidades.
La hermandad se unirá a las protestas convocadas para hoy en Tahrir, que volvió a ser ocupada tras conocerse el veredicto y que ayer, por tercer día consecutivo, seguía alojando a cientos de manifestantes.