La muerte de un soldado israelí incendia la frontera con Gaza
GAZA. Actualizado: GuardarLa muerte a tiros de un soldado hebreo y un miliciano palestino devolvió ayer la tensión a la línea fronteriza que separa a Gaza de Israel. Los incidentes -que rompieron con la tregua declarada tras la espiral de violencia del pasado marzo- tuvieron lugar a la altura del paso de Kisufim poco antes del amanecer, cuando un miembro de la Yihad Islámica abrió un agujero en la valla electrónica que separa ambos territorios y logró acceder a suelo israelí. La intrusión fue contestada por efectivos de la brigada Golani y provocó un breve tiroteo en el que perdió la vida un militar de 21 años y el atacante.
En respuesta a lo ocurrido, el Ejército de Tel Aviv procedió a bombardear la Franja y ordenó el despliegue helicópteros y aviones no tripulados en busca de sospechosos. Cuatro milicianos que circulaban en motocicletas al este de la ciudad de Janyunes resultaron heridos, según informó el portavoz de los servicios de emergencia de Gaza, Adham Abu Silmeya. Los ataques aéreos impidieron también el acceso de las ambulancias palestinas a distintos puntos, lo que ha dificultado que se conozca con exactitud el número de víctimas. Por su parte, las Fuerzas Armadas hebreas indicaron que dos cohetes fueron disparados contra poblaciones civiles al este de la frontera sin causar daños.
Intención de secuestrar
El brazo armado de la Yihad Islámica asumió la responsabilidad del ataque fronterizo y detalló que el miliciano pretendía capturar a un militar hebreo para después canjearlo por presos palestinos. El fallido intento se produce justo cuando se cumplen ocho meses de la liberación del soldado Gilad Shalit, que fue secuestrado en 2006 por el movimiento islamista Hamás y por el que las autoridades de Tel Aviv otorgaron la libertad el pasado octubre a un millar de reclusos palestinos.
Los incidentes que han devuelto la violencia a la frontera obligaron además a fuerzas israelíes de infantería a penetrar unos 350 metros dentro del territorio palestino. Así lo confirmaron vecinos de la aldea Abasan. Este hecho constituye una violación por parte del Ejército hebreo, que decretó oficialmente en 2008 una zona de exclusión de 300 metros de ancho entre la Franja e Israel. No obstante, según denuncias Naciones Unidas y diversas organizaciones humanitarias, las tropas han ampliado de facto esta zona hacia el interior del territorio palestino.