«Cuando escucho 'Spain is different' me enfado muchísimo»
MÓNACO. Actualizado: GuardarPedro de la Rosa se niega a envejecer. Ha hecho bandera de la ilusión por su deporte y se ha embarcado en el reto de relanzar al equipo HRT. Arropado por su familia (en Mónaco desfilaron su mujer y sus tres hijas en una fiesta junto al puerto), sigue con la motivación intacta a sus 41 años.
-¿Por qué dio ese salto al vacío de McLaren a HRT?
-Para mi no fue un salto al vacío, tenía muchas ganas. Es un equipo español, que está empezando y que tiene futuro. Somos pequeños, pero no peores. Luis Pérez Sala (jefe de equipo) y Saúl Ruiz de Marcos (ejecutivo jefe) me convencieron con hechos, no solo con palabras.
-¿Está España poco considerada en la F-1?
-Hay un antes y un después de Alonso. Todos le estamos agradecidos. La F-1 es un deporte anglosajón. La mayoría de los equipos tienen su sede en Inglaterra, en un radio de 40 kilómetros. Lo atractivo de HRT es que decide montar su espacio en España. Con la crisis y con la que está cayendo. Somos 75 personas. Ferrari o McLaren son 600.
-¿Se pensó en ir a Inglaterra?
-Lo más lógico hubiera sido montar la base cerca de Silverstone. Allí está la mano de obra formada y la más rápida. Pero HRT no tiene prisa. Buscamos un proyecto duradero. Para ser diferente hay que hacer cosas diferentes. Nosotros somos un equipo español.
-¿Es una forma de que tomen en serio a España en la F-1 y no solo por Alonso?
-Bueno, ja, ja, ja.. Recuerdo el programa Cracovia. Yo entro en boxes a cambiar ruedas y los mecánicos, me dicen: eh, sin prisas.. Como broma está bien, pero esto no es así.
-¿No quieren romper tabúes?
-No es trabajo de HRT romper con una sensación de vagos o de falta de planificación. Estos tabúes son rancios y viejos . En el deporte hemos roto con esa idea de que somos vagos o impuntuales. Somos competitivos y gente con una formación excelente, pero con menos oportunidades. Los mecánicos de nuestro equipo están aprendiendo, mientras otros llevan años de rodaje. Lo de 'Spain is different' me cabrea muchísimo porque no es real.
-¿Cómo se lleva ser el último?
-Yo todavía no lo he sido, ja, ja, ja... A nadie le gusta, pero yo miro dónde estaremos en unos meses. Estoy tranquilo.