CARTAS DE LOS LECTORES

Pánico

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Es lo peor que podía sucedernos: dejarnos ganar por el pánico. Cierto que el mundo financiero está revuelto, que sobre ellos planea el fantasma de la intervención gubernamental, como acaba de ocurrir con Bankia.

Seguro que los políticos no atinan en la supervisión de las entidades financieras, por ejemplo, permitir que el gobernador del Banco de España o la inspección pertinente no fiscalizara lo que era su deber censurar e impedir. Claro que está obrando en detrimento de la credibilidad que debemos ofrecer a los mercados el que se solicite que desde fuera vengan a precisar qué es lo que está ocurriendo en los bancos del país. O que el ministro De Guindos diga en Bruselas que ya se ha hecho todo lo que se podía hacer.

Todo eso genera miedo e incertidumbre, para qué negarlo. Pero, si bien técnicamente ningún banco está libre de que le sobrevenga un corralito (no puede disponer de todo el dinero que se le ha confiado), lo cierto es que favorecemos esta situación extrema si cunde el pánico en los impositores y todos reclaman sus ahorros al mismo tiempo. Entonces, el cataclismo es seguro.