Un coche bomba cargado con mil kilos de explosivos causa nueve muertos en Siria
EL CAIRO. Actualizado: GuardarNueve días después de que dos coches bomba acabaran con la vida de 55 personas en Damasco, un nuevo atentado suicida volvió a estremecer ayer a Siria. Un vehículo cargado con mil kilos de explosivos estalló en la ciudad de Deir al-Zor, al este del país, y dejó al menos nueve víctimas mortales y alrededor de un centenar de heridos.
La deflagración causó importantes daños materiales en un radio de cien metros en el barrio de Gazi Masaken Ayash, según confirmó la agencia oficial de noticias Sana. Entre los fallecidos figuran civiles y un guardia de seguridad perteneciente a un complejo militar situado en la zona, a la que acudió ayer un equipo de observadores de la ONU para inspeccionar las circunstancias del ataque.
«Consideramos que este atentado criminal forma parte de un plan del régimen para propagar el caos en Siria, después de que ha fracasado en su represión al pueblo», aseguró la dirigente del opositor Consejo Nacional Sirio, Basma Qadmani, que pidió la creación de un equipo internacional de investigación para identificar a los responsables.
Atentados como el de ayer han ido en aumento en los últimos meses en Siria, donde prosigue la violencia pese al compromiso del presidente, Bashar el-Asad, y la oposición de llevar a cabo el plan de paz del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan. Aunque la iniciativa no ha dado aún los frutos esperados, los países del G-8 ratificaron ayer su apoyo a la propuesta de Annan, que recoge un alto el fuego ya en vigor y la presencia de observadores militares desarmados.