La canciller Angela Merkel sujeta una camiseta del club de hockey sobre hielo de Dusseldorf. Abajo, Hannelore Karft, candidata socialdemócrata, en Renania del Norte Westfalia. :: AFP / REUTERS
MUNDO

Merkel se resigna a la derrota en el 'test' electoral de Renania del Norte

El 'land' alemán, cuyo voto suele anticipar el de las elecciones generales, se inclina por la alianza entre una líder socialdemócrata y otra 'verde'

BERLÍN. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La canciller federal de Alemania, Angela Merkel, espera resignada el resultado de los decisivos comicios regionales que se celebran hoy en Renania del Norte Westfalia, que se consideran un test para los comicios federales del próximo año y donde todas las encuestas señalan como claro vencedor al Partido Social Demócrata, SPD, encabezado por la política Hannelore Kraft, actual presidenta del 'land'.

Tanto la líder socialdemócrata, como su socia en el Gobierno de coalición en minoría, Sylvia Löhrmann, del partido de Los Verdes, quieren reeditar la alianza de las elecciones de 2010, pero esta vez en mayoría. «Luchamos por una mayoría rojiverde estable, con un SPD fuerte, para lo que esperamos una elevada participación electoral», declaró Kraft esta semana. De esta manera quiere evitar los problemas derivados de gobernar en minoría, lo que le obligó a disolver el pasado marzo el Parlamento federal en Dusseldorf ante la imposibilidad de firmar los presupuestos regionales. Un hecho inédito en la historia de esa región.

En Renania del Norte Westfalia no existe un partido minoritario que pueda ser usado como el comodín de la baraja para redondear mayorías, a diferencia de Schleswig-Holstein, donde se celebraron elecciones la pasada semana y en las cuales el SPD y Los Verdes consiguieron acordar un Gobierno de coalición con ayuda del minoritario partido danés (SSW). Kraft, considerada por muchos de sus seguidores como «la madre del 'land'» por su carácter cercano y por su preocupación social, solo se vale de su propia fuerza, y si saliera victoriosa hoy se convertiría en la segunda política más importante de Alemania, por detrás de Merkel.

Löhrmann destacó esta semana las aportaciones de su mandato junto a Kraft en comparación a sus antecesores masculinos. «Las dos tenemos los pies en el suelo, no tenemos que aparentar nada. Nos hemos remangado la camisa y nos hemos preocupado por Renania del Norte Westfalia, de manera pragmática», respondió.

Las dos mujeres de la Cuenca del Ruhr, antigua región minera, cuentan con un gran apoyo entre el electorado, según se desprende de los últimos sondeos publicados por los medios. Las encuestas dan un 37% de los votos al SPD y un 12% a Los Verdes, frente al 30% de la Unión Cristiano Demócrata de Merkel (CDU) y el 6% del Partido Liberal (FDP). El Estado federal más poblado de Alemania -con 18 millones de habitantes y con un endeudamiento de 125.000 millones de euros- es un bastión tradicional del SPD. La CDU es consciente de ello y no alberga grandes esperanzas hoy, sobre todo, tras la nefasta campaña del 'delfín' de Merkel, Norbert Röttgen. El actual ministro de medioambiente germano cometió una serie de errores que han hecho las delicias de sus más críticos.

Su primera aparición pública desafortunada fue en el programa de televisión Login de la ZDF, donde declaró que le gustaría ser presidente de ese 'land', pero que «lamentablemente no era la CDU quien decidía, sino el electorado», a lo que el presentador recalcó «¿lamentablemente?». Pero ya fue demasiado tarde para Röttgen y el vídeo se convirtió en uno de los más vistos.

Unos días después, comentó que «el domingo no se decide sobre la política de Angela Merkel en Europa, sino sobre la política de endeudamiento de Kraft en Renania del Norte-Westfalia», a lo que añadió que «no obstante, el resultado sobrevuela las fronteras del 'land'». Esta serie de declaraciones suscitó las críticas de sus correligionarios y de la propia Merkel que en seguida quiso dejar claro que «las elecciones del domingo son una fecha importante para Renania del Norte Westfalia, ni más ni menos».