Tony Leblanc recibe emocionado la Medalla de Oro de la Comunidad de Madrid. :: KOTE RODRIGO / EFE
ESPAÑA

Aguirre discute un modelo que no «integra» a Cataluña y el País Vasco

La siempre crítica líder del PP de Madrid arremete contra los sindicatos y augura que «caerán como el Muro de Berlín»

MADRID. Actualizado: Guardar
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Esperanza Aguirre vuelve a meter a Mariano Rajoy en un aprieto al poner en cuestión el modelo autonómico en un momento muy delicado. La Unión Europea presiona a España para que solvente las dificultades económicas de las regiones españolas y el Gobierno central advierte a las autonomías, la mayoría gobernadas por el PP, de que o cumplen con el objetivo de reducir su déficit al 1,5% o corren el riesgo de ser intervenidas, tal y como prevé la Ley de Estabilidad Presupuestaria. «Todos saben que hay que reflexionar sobre el Estado autonómico, unos los dicen en público y otro en privado», adujo ayer la presidenta de la Comunidad de Madrid durante una entrevista concedida a la Ser. Su principal queja, no obstante, no es económica. Aseguró que el actual modelo de Estado se formuló «para tratar de integrar a Cataluña y el País Vasco» y, a su juicio, «se ha fracasado» en la consecución de este objetivo.

La voz de Esperanza Aguirre ha perdido peso en la dirección del PP en los últimos años ante el absoluto dominio del partido que ha logrado Rajoy. Sin embargo, la lideresa continúa siendo un referente para una parte del partido que ve en ella a la dirigente que mejor defiende las tesis más conservadoras, en lo ideológico, y las más liberales, en lo económico, en la actual cúpula popular. Por eso se encienden varias alarmas internas cuando Aguirre insinúa que las autonomías se han convertido en un sistema «insostenible» económicamente en tiempos de crisis.

El pasado 10 de abril, Rajoy tuvo que oír como Aguirre amagaba con devolver al Estado alguna de las competencias de Madrid, como las de Justicia. El presidente se vio obligado a responder durante una sesión de control en el Senado a una pregunta sobre esta posibilidad. Rajoy negó de manera rotunda que estuviera entre sus planes discutir o plantear un debate sobre la configuración del Estado que recoge la Constitución española. «Estamos de acuerdo en evitar duplicidades y los gastos superfluos; no cuestionamos el modelo, sino la gestión del mismo», remachó.

Aguirre, antes de festejar el 2 de mayo, día de la Comunidad de Madrid, mostró su preocupación ante el hecho de que cualquier observador internacional que analice España sin conocer el sistema autonómico español «debe pensar que somos suficientemente ricos como para mantener 17 comunidades autónomas». «Ahora tenemos muchos más funcionarios y esto supone un gasto mucho más alto», acotó.

Guerra abierta

Los actos conmemorativos de día grande de Madrid contaron con la ausencia de los representantes de los sindicatos a los que Aguirre parece haber declarado ya una guerra sin cuartel. «Tienen que cambiar, porque de esta manera no van a hacer nada o si no caerán como el muro de Berlín», indicó la presidenta madrileña en alusión a las organizaciones sociales.

La lideresa del PP madrileño, en tono irónico, añadió que a las manifestaciones del Primero de Mayo «ya no salen ni los liberados». Una baja asistencia que, a su juicio, se debe a que «si no hay piquetes o coacción, no hay movilización». Unas duras críticas que no le impiden, según recalcó, tener un «gran respeto» por los líderes sindicales.

Pese a ello, Aguirre responsabiliza a los sindicatos y al PSOE de propiciar de cara al exterior una imagen de España de «quema de contenedores y algarada, a la griega» que no contribuye a la recuperación económica. Desde que el pasado sábado fuera reelegida como presidenta del PP de Madrid con el 97,2% de los votos, uno de los mensajes que más ha repetido Aguirre es la necesidad de potenciar la bandera española como símbolo de unidad del país. Un ensalzamiento patriótico que no vio durante las marchas del Día del Trabajo. «Había más banderas republicanas e ikurriñas que españolas, y eso no ayuda a dar imagen de unidad», remachó.