Los parados y los sindicatos le piden cuentas a los políticos

Un pleno tenso, aunque esta vez no como consecuencia de los enfrentamientos dialécticos entre los políticos, sino por la crispación que existía más allá del lugar que ocupaban los concejales. Los parados y los sindicatos hicieron acto de presencia para recriminar a los grupos la falta de voluntad para solucionar los problemas de la ciudad.

En el caso de los parados se pedía que se obligaran a las empresas a contratar personal isleño, una moción que defendió el PSOE y que encendió los ánimos de la sala. Si bien las protestas se dirigieron a las diferentes formaciones al sacarse temas como la contratación de las obras del tranvía o de obras municipales. Los socialistas no aceptaron la fórmula expuesta por el Gobierno local, que explicó la ilegalidad que supone la intención del PSOE. Al final, los que se encendieron fueron los desempleados que decidieron salir a la calle para recriminar la actuación de los dirigentes de las formaciones. UN grupo espero a que finalizara el pleno e increpó al alcalde, José Loaiza, que tuvo que ser escoltado por la Policía para evitar problemas.

Por su parte los sindicatos exigieron con pancartas una negociación con el equipo de Gobierno ante las medidas que se recogen en el plan de ajuste. De esta manera piden que al menos haya contactos en los próximos días.