«Un partido no acaba cuando te hacen un gol», asegura Isidro Fainé

CaixaBank, con el 12,8%, es el primer accionista de Repsol, que acaba de ver expropiado por el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner un 51% de su propiedad en la argentina YPF. Por detrás de la caja de ahorros se sitúan ahora Sacyr Vallehermoso (10% de la petrolera, tras haberse desprendido de otro 10% tras una polémica coexistencia con el accionista mayoritario) y Petróleos Mexicanos, Pemex, en la actualidad con el 9,8%.

«Un partido no se acaba cuando te hacen un gol y una eliminatoria dura muchos minutos», declaró el presidente, Isidro Fainé, repondiendo con un símil deportivo a las preguntas sobre el impacto que la incautación puede suponer para las cuentas de la petrolera y su repercusión en la propia entidad de ahorro. «¿Cómo vas a hacer una provisión?», se preguntó. «¿Acaso quieres dar la razón a los expropiadores?», añadió a continuación.

«Yo todavía creo en el derecho internacional; por eso no hay que reaccionar en 24 horas, ni se trata ahora de realizar dotaciones, sino de buscar el justo precio», apostilló. Desde su experiencia, el presidente de CaixaBank aconsejó «dejar actuar al Gobierno y escuchar bien sus argumentaciones». «Haremos todo lo posible para que la situación se clarifque», añadió.

En todo caso, la mala experiencia argentina de Repsol no frenará la expansión internacional de CaixaBank en Latinoamérica. «Nosotros compramos una empresa que ha sido nacionalizada, pero aquí no se acaba ni mucho menos nuestra estrategia, porque no actuamos 'al estilo compadre', dijo. Por eso, lo ocurrido con YPF en Argentina no enturbiará ni mucho menos las excelentes relaciones del grupo con su socio el financiero mexicano Carlos Slim, con quien La Caixa comparte numerosos proyectos y el inversor que les acompaña en los planes al otro lado del Atlántico como aliado en el grupo Inbursa. «Un hecho aislado en un país aislado no interrumpe el desarrollo del negocio en un continente que ahora mismo nos está ofreciendo lo mejor», refrendó Nin, tras anunciar la apertura de oficinas bancarias en Colombia, Perú y Estados Unidos. «Y estamos analizando otras operaciones que, si salen, las contaremos», agregó.

«La experiencia en Latinoamérica es, en todo caso, muy positiva», zanjó el presidente Fainé, que no abandona las esperanzas de un reconocimiento de la realidad del trabajo de Repsol en YPF.