El fraude de las prótesis
Actualizado: GuardarEl fraude de las prótesis Pip ha alcanzado a más de 30.000 mujeres en España. Un producto aprobado por la Unión Europea y las autoridades que está produciendo dolor, desasosiego, incertidumbre y que cuesta miles de euros a todas las afectadas. Siliconomas, ganglios, deformidades y problemas autoinmunes son el resultado macabro de la falta de control sanitario y del afán de lucro del fabricante, distribuidor y los cirujanos. Las Administraciones públicas no están asumiendo su responsabilidad ya que, la publicación del Protocolo de actuación y el Teléfono de atención no son más que golpes de efecto que no sirven para nada. La Administración sanitaria no puede dar la espalda a este problema de salud pública y debe poner los medios necesarios para evaluar el problema, creando un censo de afectadas y ofreciendo a las mismas su tratamiento médico, peritaje de las prótesis, analíticas, ecografías y resonancias magnéticas, incluyendo la explantación y la nueva implantación.