Sam Worthington llega este viernes a los cines con 'Ira de Titanes'. :: K. DOWLING / AP
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«Es importante no creérselo»

El actor australiano sigue en el género de acción con 'Ira de Titanes', su segunda incursión en la mitología clásicaSam Worthington Actor

LOS ÁNGELES. Actualizado: Guardar
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La intensidad en la mirada de Sam Worthington recuerda a la de su compatriota Mel Gibson, aunque su forma de hablar se parece más a la de otro australiano, Russell Crowe. Ambos son directos, secos, sin pelos en la lengua y encontraron su sitio en Hollywood gracias a sus músculos y la rudeza de sus maneras. Hace tres años, Worthington era un desconocido para el público internacional aunque en su país ya fuera famoso. Gracias a 'Terminator', 'Avatar' y 'Furia de Titanes' se convirtió en el actor de acción del momento. Mañana vuelve a la gran pantalla con 'Ira de Titanes', la secuela de la película, donde da vida al mitológico Perseo.

-¿Dudó en algún momento en volver a convertirse en Perseo?

-Se convirtió en un dilema porque nunca había hecho una secuela. Además, siempre he dicho que mi interpretación en la primera película no me gustó. Ahora, por suerte, puedo redimirme frente al público y corregir errores. Eso ha sido maravilloso y al mismo tiempo estresante porque la responsabilidad era enorme.

-Perseo ¿es un hombre sin miedo, valiente?

-Es muy valiente, pero sí tiene miedo. Sabe superar sus temores. Yo también haría lo que fuera por salvar a mi familia. Es la razón principal para luchar. Perseo está tratando de rescatar a su padre. Y créeme que si mi padre estuviera cautivo, yo haría lo que fuera por ayudarle sin importarme mi propia vida.

-¿Puede confesar alguno de sus errores?

-Me faltó confianza para ser Perseo. No representé el personaje de Perseo con la profundidad necesaria. Tal vez porque no me identifiqué con el personaje o me perdí en la aventura, no lo sé. Ese fue uno de los motivos por el que no quería hacer la película. Pero ahora estoy muy contento con el resultado.

-¿Le molestan las críticas?

-No. Me molesta mucho más cuando yo no estoy contento con mi trabajo. No leo lo que escriben sobre mí. Soy un tipo muy responsable con el trabajo y sé que me debo al público. El detonante para decidirme fue superar el reto, sentirme más fuerte como actor, construir una historia mejor y creo que lo hemos conseguido.

-¿Cómo elige cada proyecto?

-Hasta ahora no he estado precisamente en posición de poder elegir papeles, pero creo que lo más importante de un proyecto es el director. Trato de buscar realizadores que me inspiren como actor, que sepan contagiarme su pasión. Me gustan los que son valientes, que se arriesgan en cada proyecto. También pienso antes de elegir si yo iría a ver esa película. No tiene sentido entregar cuatro, seis o trece meses de tu vida a un proyecto que tú no quieres ver en el cine. Es algo que me parece ridículo.

-¿Qué director le interesa, a quién sigue?

-Espero trabajar muy pronto con James Cameron. La verdad es que con todos los directores con los que he trabajado me gustaría repetir. Pero ahora mismo quisiera recibir una llamada de Steven Spielberg o de Alfonso Cuarón.

-¿Cómo se enfrenta a la fama?

-Siento que la gente que está conmigo ha cambiado. Todo lo que me rodea gira mucho más rápido. Trató de calmar los ánimos de mi agente, de mi mánager, de mi publicista y tomar las decisiones adecuadas porque lo importante es acertar con cada película.

-¿Qué le da miedo en la vida?

-Los ratones. Los odio (risas).

-Australia parece que está de moda. Mel Gibson, Russell Crowe, Hugh Jackman... ¿Qué tienen en común?

-Llamamos a las cosas por su nombre, tenemos los pies en el suelo, somos hombres de familia, nos interesa el trabajo y no la tontería y la superficialidad que a veces se da en esta profesión.

-¿El cine de acción es su género favorito?

-Me gusta el cine en general. Desde pequeño he estado fascinado con el mundo del cine. He pasado muchas horas de mi vida viendo películas porque mi sueño siempre ha sido convertirme en actor.

-¿Cuáles son las expectativas que provoca vivir un momento tan increíble como el que usted está viviendo?

-Ahora mismo lo más importante es mantenerme sereno, sin creérmelo demasiado. Estoy agradecido por lo que me está pasando, pero también sé que cuanto más subes más dura puede ser la caída y quiero ser humilde. No quiero pensar que esto es una broma. Me tomo en serio este momento en mi vida, pero le ha pasado a muchos actores amigos míos como Mel o Russell y los dos me han dicho lo mismo, «abraza y disfruta el momento». Eso es lo que quiero hacer, disfrutar sin creérmelo demasiado.

-¿Cuáles son sus sueños?

-Siempre he soñado con estar en la posición en la que estoy. No pienso demasiado en el futuro porque quiero saborear el presente y eso es excitante.

-¿Es cierto que le gusta jugar al rugby?

-Juego una liguilla. Me dan una paliza cada vez que juego, pero merece la pena.

-¿Dónde vive, en Estados Unidos o en Australia?

-En Hawai. Rodé allí una película y me enamoré. Es una ciudad única que me recuerda el área donde yo crecí. Tengo muchos amigos y puedo hacer surf, que es una de mis pasiones. Creo que es una de las decisiones más inteligentes que he tomado en mi vida.