Sin soluciones ante la huelga de los autobuses

El gobierno local quiso dejar claro ayer, y lo hizo por boca de la alcaldesa, María José García-Pelayo, que «ha hecho todo lo que se podía» para tratar de buscar soluciones al conflicto de los autobuses, un servicio inmerso ya en su séptima semana de huelga a la que no se le ve el final, sobre todo porque Urbanos Amarillos, la concesionaria, no puede acogerse a los fondos ICO para cobrar su deuda. Eso sí, García-Pelayo recordaba ayer que en este caso el gobierno local «ha hecho sus deberes» al liberar los avales, por lo que recalcó que la situación ahora «es un problema entre empresa y trabajadores». Respecto a los problemas con los servicios mínimos, que podrían dejar de prestarse por las averías, advirtió que «están fijados por la autoridad laboral y deben cumplirse», aunque no dio más pistas de qué ocurrirá si no es así.