El candidato socialista presencia la salida de una carrera popular de benjamines en San Juan de Aznalfarache. :: JOSÉ MANUEL VIDAL. EFE
ANDALUCÍA

Griñán ironiza: «Arenas se ve ganador»

Dice que no fue a la manifestación porque no va a hacer como Rajoy con Zapatero, «colocarse detrás de la pancarta» con cualquier pretexto El dirigente socialista asegura que irá hoy al debate de Canal Sur pese al plante del líder popular

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La campaña electoral, enquistada entre ERE y reforma laboral, se va a quedar sin debate televisado entre los candidatos. Al menos hoy. La polémica lleva varios días dando tumbos, pero ayer cobró protagonismo porque los candidatos hablaron de ello ya que esta tarde está programado el debate a tres (Griñán, Arenas y Valderas) en Canal Sur. Griñán acudirá a Canal Sur, según confirmó. También irá Diego Valderas. Pero el partido de Javier Arenas mantiene el veto a la cadena autonómica. Dice el candidato popular que no va a debatir a Canal Sur porque la cadena andaluza está condenada por la Junta Electoral por falta de neutralidad. También dice que está abierto a cualquier debate en otro lugar.

El PSOE piensa que son excusas y fuentes del partido se quejan de que los populares no responden a las llamadas o mensajes enviados para acordar un cara a cara. Griñán dio su versión en un acto de la mañana en San Juan de Aznalfarache a los periodistas: «Él (Arenas) se ve ganador y no quiere arriesgar, imagino que será eso».

El candidato socialista insiste en que los debates son importantes porque dan la oportunidad a los candidatos de hablar de lo que quieran y citó como ejemplo que puede servir para que el del PP explique por qué la reforma laboral es «justa y necesaria, como dice Mariano Rajoy o una ruptura del modelo de convivencia como digo yo». Griñán recalcó que no sirve para crear empleo, sino para que los despidos sean más baratos. También dijo que no acudiría a la manifestación contra la reforma porque como presidente del PSOE cree que no debe y no hacer como Rajoy «que se colocaba detrás de la pancarta contra Zapatero por cualquier cosa».

Pocos creen ya que un debate pueda influir en el voto ya decidido, pero sí puede hacerlo sobre los indecisos. La encuesta del CIS detectó hasta un 31% de indecisos, un 29,8% de ellos dudaba entre votar al PSOE o al PP y un 14% entre PSOE o IU. Es en esta franja de indecisos en la que el PSOE tiene depositadas sus esperanzas de recuperación del voto perdido.

Encuestas

Griñán volvió a insistir ayer en que lo que aprecia en las encuestas últimas que se publican es que los socialistas van recortando distancia con el PP, aunque este sigue sacándole más de siete puntos. «Todos los datos indican que vamos día a día recortando», subrayó.

Tras la polémica se esconden otras razones. Está claro que el debate a tres de hoy en Canal Sur no es el verdadero debate que se debe producir estas elecciones. El verdadero cara a cara que esperan los ciudadanos es entre Griñán y Arenas, los que se juegan la presidencia.

El PSOE siempre ha confiado en la capacidad de defenderse de Griñán en un enfrentamiento verbal con Arenas. El socialista sabe manejar bien los temas económicos y es ágil en la réplica. Pero también sabe que Arenas haría todo lo posible por circunscribir el coloquio al caso de corrupción de los ERE en un momento de gran actualidad con el ingreso de Guerrero en la cárcel. Algo que no conviene al presidente andaluz. De hecho ayer se negó a contestar preguntas de los periodistas sobre los ERE.

Tampoco conviene a Javier Arenas que Griñán, como ha ocurrido en el Parlamento muchas veces, tenga uno de sus mejores días como interlocutor y le saque su sueldo u otros casos de corrupción del PP. Griñán no aclaró si piensa debatir con Valderas en caso de que Arenas no se presente. En el PSOE piensan que un debate entre dos posibles aliados de Gobierno sólo interesa a Valderas.La cavarana de Griñán tuvo ayer un respiro, se supone que para preparar el debate. Por la mañana el candidato acudió a un maratón popular en San Juan de Aznalfarache, donde presenció la carrera de los más pequeños.