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Siete de cada diez vascos apoyan el acercamiento de presos
Solo un 21% de la población de Euskadi se muestra favorable a conceder una amnistía general a los reclusos de la banda terrorista
BILBAO. Actualizado: GuardarLa mayoría de los vascos cree que el Gobierno central debería facilitar la reinserción de los presos de ETA que «renuncien a la violencia» y defiende el acercamiento de los reclusos a las cárceles próximas a Euskadi. Casi el mismo porcentaje de la población rechaza la concesión de una amnistía general a los presos de la banda terrorista e insiste en que estos deben «reconocer el daño causado». De esta forma, siete de cada diez vascos están de acuerdo en facilitar la reinserción de los presos de ETA que renuncien a la violencia y apoyan su acercamiento a cárceles del País Vasco, mientras que solo un 21 % concedería una amnistía general a estos reclusos.
Estas son algunas de las principales conclusiones que se extrae del Sociómetro elaborado por el Gobierno vasco a propósito del fin del terrorismo, anunciado por ETA el pasado 20 de octubre. El estudio fue elaborado entre el 6 y el 11 de febrero, casi cuatro meses después de que ETA anunciara el fin de su actividad violenta, a través de 2.254 entrevistas en domicilios.
El 52% de los vascos cree que ETA ya ha renunciado definitivamente a su actividad armada, frente al 36% que opina lo contrario. Además, siete de cada diez vascos consideran que ETA desaparecerá definitivamente, y de ellos el 27% cree que lo hará en uno o dos años; el 23% en menos de cinco años y el 19% en más de un lustro. Frente a esta mayoría, el 20% vaticina que ETA nunca dejará de existir.
El 57% ve con optimismo el final de la violencia y el 49% también con ilusión, frente a los que esta situación les genera confusión (20%) y preocupación (18%). También la encuesta refleja que una mayoría, otro 57%, opina que la sociedad vasca ha hecho algo, aunque no lo suficiente, o muy poco por las víctimas del terrorismo, frente al 28% que dice que se ha hecho lo que se tenía que hacer.
A este respecto, cuatro de cada diez ciudadanos señala que las víctimas han defendido legítimamente sus derechos y un 18% que han mantenido una actitud ejemplar porque no han promovido el odio, aunque un 26% critica que han querido tener un papel político que no les corresponde.