El juez ordena a la Guardia Civil rehacer toda la investigación sobre el chivatazo
Actualizado: GuardarPablo Ruz se marcha de la Audiencia Nacional dejando deberes, y muchos, sobre todo a la Guardia Civil en el 'caso Faisán'. El todavía titular del Juzgado Central número 5 ordena al instituto armado, en la que probablemente sea su última resolución sobre el 'chivatazo', que revise de cabo a rabo la investigación sobre el soplo al aparato de extorsión de ETA en el bar Faisán de Irún el 4 de mayo de 2006.
Para ese titánico trabajo, que en la práctica consiste en rehacer unas indagaciones que llevaron a la Policía cinco años de trabajo, el juez da un plazo de dos meses a la Guardia Civil, que en esas ocho semanas debe señalar quienes fueron «los presuntos responsables» de la delación a ETA después de analizar «todo el material recopilado» en la causa.
La decisión de Ruz de involucrar al instituto armado es respuesta al fallo de la Sala de lo Penal de la Audiencia, que en noviembre revocó el procesamiento de los tres imputados (el exdirector general de la Policía Víctor García Hidalgo, el exjefe superior de la Policía de Euskadi Enrique Pamiés y el inspector José María Ballesteros) ordenó a Ruz que siguiera con la investigación y reprochó al juez que se hubiera «nutrido de material indiciario aportado exclusivamente» por el equipo policial que dirigía Carlos Germán.
El instructor, en sintonía con la Fiscalía, cree que reactivar el caso tras el fallo de la Sala de lo Penal es una diligencia «de obligado e inevitable cumplimiento».