La izquierda de EE UU pierde un héroe en el Congreso

La izquierda de EE UU lloraba ayer a su figura más querida en el Congreso. El diputado de Ohio Dennis Kucinich perdió su asiento en unas macabras primarias forzadas por la desaparición de su distrito electoral, que ha sido fusionado junto al de una demócrata mucho más conservadora que le venció sin dificultades.

Kucinich no es un diputado cualquiera sino la voz antibélica con más peso en Washington. Fue uno de los pocos en oponerse a Ley Patriótica que tras los atentados del 11-S dio carta blanca a Bush, también se opuso a la invasión de Irak y a la de Libia. Defendió a capa y espada una sanidad pública universal, pero acabó cediendo a la reforma sanitaria de Obama que solo contempla seguros privados.

Los republicanos le habían declarado la guerra. Aprovechando la pérdida de población de Ohio, que obliga a suprimir dos distritos electorales, rediseñaron el mapa electoral como una trampa para Kucinich, que había pasado de ser un niño pobre que vivía en un coche al alcalde más joven de EE UU. A sus 65 años ha ganado seis elecciones al Congreso y ha perdido dos presidenciales. Su rival Marcy Kaptur, que ha votado numerosas veces para limitar el aborto y reducir fondos de planificación familiar, puso en marcha una sucia campaña contra él.

En noviembre le tocará enfrentarse a un colorido personaje que se estrenó en la política el martes pero alcanzó la fama en 2008. Samuel Joseph Wurzelbacher, conocido como Joe El Fontanero desde que John McCain citase sus opiniones en un debate presidencial.