Los móviles no son sólo inteligentes

Los teléfonos móviles de última generación no se conforman con ser más inteligentes que nunca. La despiadada lucha entre los fabricantes por conquistar la mayor porción posible de una tarta que ha adquirido dimensiones planetarias obliga a los estrategas a explorar nuevos nichos de mercado y a exprimir las meninges de sus ingenieros con propuestas tan variadas como procesadores ultrarrápidos de cuatro núcleos, modelos sumergibles, capaces de proyectar la información en una pared o que incorporan cámaras de una resolución brutal. Estas y otras propuestas, a cual más sofisticadas, se presentan desde ayer en la feria mundial del móvil (MWC) de Barcelona.

El salón fue inaugurado por el príncipe Felipe, quien destacó la importancia de que la ciudad condal se convierta por unos días en la capital mundial del móvil, un sector en expansión que consideró «clave» para salir de la crisis y crear empleo.

Cámara de 41 megas

La multinacional finlandesa Nokia, ausente en los últimos años por una anemia comercial sin precedentes en su historia, protagonizó la primera sorpresa del día al presentar el Nokia 808 PureView, un teléfono móvil que cuenta con una cámara de 41 megapíxeles de resolución. Se comercializará a partir de mayo y funcionará con el sistema operativo Symbian, el propio de la firma, que permitirá comprimir las fotografías para facilitar su envío a través de las redes sociales.

La multinacional finlandesa, que espera revertir una continuada pérdida de cuota de mercado gracias al acuerdo que firmó hace un año con Microsoft para desarrollar móviles con Windows, anunció ayer, por otra parte, que lanzará próximamente en el mercado mundial una nueva gama de teléfonos. Son los Asha 202, 203 y 302, que pretenden llegar a los mercados emergentes y a los más jóvenes con un precio más bajo y que utilizarán el sistema operativo Windows Phone. También presentó dos terminales nuevos para la gama Lumia, que nació hace un año como resultado de su alianza con Windows.

Había más novedades en la feria, y entre ellas destacó la presentación, por el fabricante coreano Samsung, del Galaxy Beam. Un teléfono inteligente que es también proyector de contenidos y que permite compartir fotos, vídeos y otros formatos digitales proyectándolos directamente sobre la pared u otra superficie plana. El dispositivo incluye una aplicación que facilita la elección del contenido, así como activar la proyección de forma muy sencilla. Además, ofrece una nueva forma de compartir los contenidos a través de las redes sociales.

Al igual que Nokia, HTC se ha centrado en la faceta fotográfica de los móviles. Las mejoras en sus modelos pasan por una mayor rapidez a la hora de captar instantáneas de más calidad, incluso en ráfaga. Las últimas novedades de esta compañía, disponibles en el mercado a partir de abril, prometen llegar con la última versión Ice-Cream Sandwich de Android y la capa Sense 4.0. Además, se pueden conectar con cualquier televisor inteligente con sólo 'lanzar' las imágenes desde el móvil a la pantalla, arrastrándolas con tres dedos.

Por su parte, el fabricante chino Huawei presentó un auténtico 'fórmula 1', el primer móvil inteligente con procesador de cuatro núcleos para hacerlo más rápido y eficiente. Se trata del Ascend Quad, con pantalla de 4,5 pulgadas, que utiliza el sistema operativo Android 4.0 y una gestión de energía que le permite ahorrar hasta un 30 % de batería.

En un balde de agua

Las azafatas del expositor de Fujitsu no dejaban en esta jornada inaugural del congreso de meter y sacar de un bol lleno de agua, y ante el asombro de los visitantes, la High Spec Waterproof, un tableta (LTE) con sistema operativo Android que puede ser sumergida en agua hasta metro y medio de profundidad durante 30 minutos, e incluso grabar vídeo mientras tanto.

La firma ZTE -que vendió 60 millones de móviles en el último año y es el cuarto fabricante del planeta- presentó el ZTE ERA, un móvil de alta gama (Android) con una pantalla de 4,3 pulgadas y procesador Nvidia que según Dai Sha, representante de la empresa asiática, está en posición de competir con el i-Phone de Apple. La marca de la manzana, por cierto, fue la gran ausente del congreso, ya que prefiere montar sus propios 'saraos' mediáticos.