Mensaje crítico
La carta suscrita por doce gobiernos europeos pidiendo medidas de estímulo requiere una explicación de Rajoy
Actualizado: GuardarLa carta revelada por Mario Monti que doce jefes de Gobierno, entre ellos el presidente Rajoy, han hecho llegar al presidente del Consejo y al de la Comisión europea proponiendo una agenda para el crecimiento ha sido la primera iniciativa adoptada en el ámbito de la Unión al margen de la entente Merkel-Sarkozy. Entre los firmantes hay países intervenidos como Irlanda, en recesión como Holanda, fuera del euro como el Reino Unido y economías de trayectoria propia como la sueca o la finlandesa. Un abanico suficientemente variado y de peso como para hacerse oír en Bruselas. La misiva trata de contrapesar los esfuerzos que todos los países están realizando para contener y rebajar el déficit público con el impulso de políticas orientadas al afianzamiento del mercado único, la liberalización en el sector de los servicios, la apertura a la economía internacional y la adaptación del tejido productivo a parámetros de mayor competitividad. Aunque sus postulados literales podrían ser rubricados por Berlín y por París. Entre otras razones porque la crítica que la carta encierra al hecho de que las entidades financieras se sientan protegidas por su ineludible rescate o la disposición que manifiesta a la apertura comercial de la UE forman parte de un capítulo de principios biensonantes que sería imposible aplicar sin el concurso de Alemania y Francia. La iniciativa, que ya ayer alteró aunque fuese informalmente el orden del día del Eurogrupo reunido para dar el visto bueno al segundo rescate de Grecia y cuyo destino es la reunión del Ecofin de pasado mañana, se hace eco de una inquietud generalizada respecto a los límites del ajuste presupuestario y a su directa incidencia en los pronósticos de recesión. Pero las posibilidades reales que las economías europeas tienen de conciliar una severa consolidación fiscal con medidas de estímulo a la reactivación dependen de Alemania y, más genéricamente, de las economías que hoy parecen a salvo de la recesión, que son las que pueden propiciar la recuperación de las demás por la vía de la demanda exterior. En cualquier caso la revelación de que existe una carta suscrita por doce Gobiernos europeos, sin que entre ellos estén el alemán y el francés, solicitando corregir el rumbo de las políticas económicas de la UE requiere una explicación pormenorizada por parte de sus firmantes y de manera singular por parte del presidente Rajoy.