Los gaditanos tiran de los ahorros para capear la crisis y llegar a fin de mes

La crisis económica, el paro y el agotamiento de los subsidios por desempleo están llevando a muchas familias gaditanas a tirar de los ahorros. Así se pone de manifiesto en el informe publicado por el Banco de España del que se desprende que el nivel de ahorro ha bajado en la provincia en torno a un 15 por ciento, pasando de los 14.100 millones de euros que había en los depósitos de las cajas de ahorro en junio de 2008, a los 12.206 que había en el mismo periodo de 2011. A esto hay que sumar otro aspecto en el que todos los expertos coinciden y es en que las familias gaditanas cada vez tienen menos margen de ahorro, porque los que tienen la fortuna de conservar el trabajo tienen que ayudar a otros parientes o amigos.

Paralelamente, la situación económica está conduciendo a que los pequeños inversores busquen amparo en los valores refugio. Una apuestas más o menos seguras ante el riesgo que implica la bolsa o la inversión en renta variable y en fondos de inversión. En este contexto, los depósitos fijos a plazo se han convertido en el producto estrella de las entidades bancarias, porque aunque no da grandes dividendos, al menos son seguros y eso es precisamente lo que más vende en estos momentos tan convulsos. Este producto tiene la particularidad de que la inversión está condicionada al cumplimiento del plazo fijado. Eso significa que no se puede sacar dinero antes de la fecha establecida, aunque en caso de necesidad se pueden retirar con anterioridad mediante el pago de una penalización o la liquidación de la inversión con un valor menor.

Los informes del Banco de España indican que España es el segundo país de la zona euro por volumen de depósitos con 1,09 billones de euros a cierre de junio, sólo por detrás de Alemania con 1,12 billones. Eso significa que queda poco dinero para repartir entre muchas entidades, lo que las aboca a ofrecer tipos de interés muy por encima del Euríbor. Ante esa situación, los bancos se han lanzado a una guerra de depósitos que llegó a ser calificada de «insostenible» por el Fondo Monetario Internacional. Es el caso de la provincia, donde las entidades bancarias están ofreciendo en algunos casos un interés al 4 por ciento por los depósitos a plazo fijo, mientras el Euríbor está al 1,83. La compra de deuda pública es otro de los valores en el que está depositada la esperanza de algunos inversores. Hace unos meses la Junta de Andalucía lanzó una emisión de bonos destinada a minoristas. La emisión ofrecía una rentabilidad del 4,25 por ciento con la que preveía captar un importe de 400 millones de euros, ampliable hasta 600 millones de euros. La razón por la que la Junta recurre a este tipo de emisiones es porque se trata de una buena alternativa para captar financiación por un importe relevante en el contexto actual.