El 'Wok' se caracteriza por la habilidad de sus cocineros. :: C. C.
sucesos | SAN FERNANDO

Dos cocineros de un restaurante de Bahía Sur heridos en una pelea

Los empleados del local, que se lanzaron sartenes y platos, tuvieron que ser trasladados al Hospital Puerta del Mar

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Dos no pelean si uno no quiere, pero al parecer en este caso ambos tenían ganas de enfrentarse. Dos cocineros del popular restaurante conocido como 'Wok', ubicado en el centro comercial Bahía Sur, se pelearon ayer y tuvieron que ser trasladados hasta el hospital Puerta del Mar, por las heridas que se provocaron al tirarse platos y sartenes.

Todo ocurrió sobre la una y cuarto de la tarde. Una hora en la que los restaurante se preparaban para la faena del mediodía que durante la semana no resulta tan agotadora como en el fin de semana. Aunque en un principio se desconoce la causa real del enfrentamiento, lo cierto es que era común ver como estas personas discutían. De hecho, por todos eran sabido que no se llevaban bien y aunque hasta ahora no habían llegado a las manos, el resto de empleados sí eran consciente de lo mal que se llevaban.

Como ocurrió otra veces el tono de voz elevado llamó la atención de los usuarios y trabajadores del centro hasta que en esta ocasión, la disputa llegó a más y se vio como los dos cocineros, de nacionalidad china, sellaban su rivalidad con diferentes golpes. No contentos con el volumen que estaba cogiendo la pelea, decidieron elevar aún más y coger todo lo que estaba en sus manos para poder herir al adversario. Al parecer por el restaurante volaron platos y sartenes, hasta que un golpe certero, con una cacerola, en la cabeza puso fin a toda la disputa, al quedarse uno de los contendientes en el suelo inmóvil.

Hasta el lugar acudieron, alertados por el resto de personas que asistieron a la trifulca, efectivos de la Policía Nacional, la Policía Local y efectivos sanitarios. Al llegar se encontraron a uno de los cocineros tendidos en el suelo sin moverse, mientras que el otro estaba escondido detrás de uno de los mostradores con abundante sangre en la cabeza.

Al comprobar que no existía ninguna herida de gravedad, la Policía intentó determinar qué es lo que había ocurrido. Sin embargo se encontró con una barrera que obstaculizó la investigación. Ninguno de los que habían llegado a las manos sabían español, mientras que ninguna de las personas que estaban presentes entendían el chino.

Motivo por el que los agentes tuvieron que esperar a que llegara un traductor que despejara la incógnita, que no se resolvió ya que el uno se acusaba el otro. Finalmente uno tuvo que ser trasladado en ambulancia por un golpe en la cabeza hasta el hospital Puerta del Mar de la capital gaditana; mientras que la otra víctima era conducida por la Policía Nacional hasta el mismo centro sanitario, presentando lesiones leves. Esta persona contaba además con varios enfrentamientos con otros empleados y fue detenida aunque puesta en libertad con cargos.