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Los marineros de Barbate acogen con entusiasmo y precaución la noticia

CÁDIZ Actualizado: Guardar
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Barbate es un pueblo pesquero y si no puede pescar se descompone. Días raros los que vive una localidad que mira con sus barcos anclados en el puerto el pasar de los días a la espera de que lleguen vientos favores. Ahora han sentido un pequeño soplo, si bien por el momento no es suficiente para cambiar la desesperación por esperanza.

Fue un duro golpe el que recibieron armadores y pescadores una vez que se conoció la noticia de que el convenio pesquero con Marruecos terminó. «Nosotros queremos pescar, ir a faenar. Es lo único que nos importa y l que esperamos es que nos digan que podemos ir a hacerlo», aseguró el patrón mayor de la cofradía de Barbate, Ambrosio Varo.

La noticia fue acogida con ilusión por parte de los pescadores, si bien con cierto recelo pues son consciente de que aún queda mucho camino por recorre hasta que se determine un nuevo convenio de pesca con Marruecos, pero al menos no es la postura anterior. «Hombre la situación para nosotros es más que complicada, porque no podemos trabajar y nos han quitado el sustento. Lo único que queremos es que este asunto se resuelva cuanto antes y se pueda llegar a un acuerdo de forma que podamos volver a salir con los barcos». Eso sí el anterior acuerdo se gestó tras cinco años de conversaciones, algo que si se repite puede ser nefasto para Barbate. «Hay que tener en cuenta que lo único que sabemos es pescar, que eso es nuestra vida y lo que queremos hacer. Esperemos que haya consideración por parte de los políticos y sensibilidad para que se aligeren los trámites y se pueda ir a pescar».

Mientras tanto esperan las ayudas comprometidas para aliviar la situación que padecen y como compensación por la ruptura de los acuerdos. Según explicó el propio Ambrosio todavía no han llegado si bien espera que sea durante estos días cuando se produzca. «Estamos pendientes porque se debe resolver en estos días, aunque por el momento no hay nada. Aunque la verdad es que preferimos salir a trabajar. Ahora con este cambio de postura tenemos algo de esperanza, pero con la situación que tenemos y a la espera que se solucione, necesitamos las ayudas para tirar para delante». Los únicos que faenan por el momento son los almadraberos que preparan en tierra su temporada.