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Las cuatro almadrabas arrancan hoy su campaña para calar en primavera
El mantenimiento del tope de capturas igual que en 2011 da «algo de tranquilidad» a una flota acostumbrada a vivir al filo de la navaja
CÁDIZ. Actualizado: GuardarEste año no se ha hablado mucho de ellos. El protagonismo, para mal, lo están teniendo en la provincia de Cádiz otros pescadores, igual de sufridos, igual de combativos, igual de sumisos a los dictámenes políticos que se toman en Bruselas.
Pero los almadraberos no descansan. Las cuatro artes que se calan en Barbate, Zahara, Conil y Tarifa cuentan ya las horas para iniciar la actividad, los hombres comienzan a preparar los bártulos y papeles para incorporarse; es la vuelta de la pesca tradicional del atún rojo.
Así, y aunque no será hasta el próximo mes de abril cuando se calen las redes y los copos en la mar, a partir de hoy ya habrá profesionales de toda una vida trabajando en tierra firme. «Hay que preparar las redes, sacar del almacén las anclas y muchos otros preparativos», explicaba ayer uno de estos pescadores a LA VOZ.
La patronal de almadrabas, la OPP-51, también lo tiene claro. La temporada está «a punto de comenzar» con los dos primeros meses de trabajo en tierra, a los que seguirán otros dos de 'levantás'.
Este año el sector gaditano del atún rojo repite los límites de cupos de 2011. El organismo internacional encargado de adjudicar las cuotas a las distintas flotas no ha modificado las cifras y España volverá a contar con un Total Admisible de Captura (TAC) de 2.400 toneladas para esta temporada, de las que algo más de 630 serán para los caladeros locales.
Este hecho hace que, en un primer momento, el sector no vaya a vivir la convulsión de años anteriores, cuando los recortes de cupos impuestos por la Comisión de Conservación, Iccat, pusieron en jaque el futuro de casi medio millar de familias que viven de esta pesca. Este mantenimiento de capturas, aunque en un nivel menor al que el sector demanda, se debe en parte a los informes científicos que avalan la recuperación de la especie.
Pero los almadraberos no lanzan las campanas al vuelo. Ya el pasado año las 630 toneladas autorizadas no fueron suficientes para mantener los seis meses de trabajo a las flotas, y hubieron de recurrir, como harán de nuevo este año, a la compra de cuotas o a su trabajo para el Instituto Oceanográfico Español.
Además, como principal novedad en esta temporada, las almadrabas gaditanas estudian solicitar la autorización para el engorde de los atunes en las redes. Zahara, Tarifa y Conil se sumarían así a lo que ya hizo en 2011 Barbate. Este engorde, legal y que no afecta a la calidad del atún ya que los alimentos son otros peces, sí tendría una consecuencia positiva para el comercio del producto, que en su mayoría se exporta al mercado japonés.
Reunión
La Organización de Productores Pesqueros de Almadrabas (OPP) ha solicitado por escrito una reunión al secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, para exponerle la situación de las almadrabas y trasladarle la necesidad de seguir siendo este año observatorio científico para comprobar la evolución de la especie, ya que con la «cuota insignificante» que tienen asignada es la única garantía de que la campaña dure seis meses y pueda «sobrevivir» el sector.
En declaraciones a Europa Press, la directora gerente de la OPP, Marta Crespo, ha señalado que este sería el tercer año en que las almadrabas harían de observatorio científico, recordando que el proyecto el Instituto Español de Oceanografía (IEO) consideraba oportuno hacer una valoración del stock de tres a cinco años para poder ver adecuadamente la evolución del recurso.