El Real Madrid enreda la final de Copa
Cobra fuerza la opción del Camp Nou y también se barajan como alternativas Mestalla, La Cartuja y el Calderón Athletic y Barça quieren jugar en el Bernabéu, pero el club blanco anuncia obras en su estadio
Actualizado: GuardarEl temor del Real Madrid a la posibilidad de que el Barcelona celebre un título de Copa del Rey en su casa y, por consiguiente, su negativa a brindar el estadio Santiago Bernabéu como escenario de la próxima final entre los culés y el Athletic, ha generado un nuevo embrollo en el fútbol español. A diferencia de Inglaterra, donde se impone la tradición y todos los gustos y deseos confluyen en Wembley, aquí es complicado elegir sede. Y más aún si el duelo definitivo lo disputan dos equipos con un volumen de socios tan importante que necesitan un recinto de gran aforo para poder satisfacer la demanda de sus abonados.
La Federación Española, organizadora del torneo, condiciona la elección final a las sedes que se postulen y al acuerdo de los clubes. Todo parecía sencillo. Los dos clubes protagonistas desean que Chamartín albergue la final, prevista para el domingo 20 de mayo, o para el viernes 25 si el Barça accede a la final de la Liga de Campeones programada para el día 19 de ese mes en Múnich. Pero afloran las viejas rencillas y agravios entre Madrid y Barcelona. En el club blanco han encontrado un antecedente favorable: les dolió la negativa del club azulgrana a ceder su estadio para la final de 2004 que el equipo de Queiroz perdería contra el Zaragoza en Montjuic. Toca venganza.
El club de Florentino Pérez anuncia obras en su estadio en cuanto concluya la Liga, el próximo 13 de mayo, y ha hecho saber a la Federación que el Bernabéu no estará disponible. ¿Una maniobra de escape? En 2007, tiempos de Ramón Calderón, el Madrid puso pegas como sede de la final. Se esfuma en cuanto el Getafe eliminó al Barça en semifinales.
La segunda opción barajada en las últimas horas gana enteros en cuanto a populismo pero es compleja. El Camp Nou, con 100.000 asientos, tienta al Athletic. Le situaría ante un reto de dimensión mundial y a la directiva que preside Josu Urrutia le ahorraría el problema del reparto de entradas, ya que cada club contaría con unas 35.000. Pero una cosa es lo que se dice y otra la realidad. Se daría un agravio deportivo, ya que los azulgrana jugarían en casa, y un desequilibrio a la hora del desplazamiento de las aficiones, toda vez que los vascos tendrían que recorrer más de 600 kilómetros.
'Centenariazo'
Sobre el papel, el Barça estaría encantado de jugar en el Camp Nou. Pero es un falso deseo. En el fondo, en el entorno de Guardiola consideran que podría tener un efecto bumerán. Actuar en casa genera más presión al equipo local. Y existen precedentes negativos. El célebre 'Maracanazo', aquella final de la Copa de Europa de 1986 perdida por el Barça ante el Steaua de Bucarest en los penaltis o el 'Centenariazo' del Deportivo en el Bernabéu. El Barça no se pronunciará públicamente hasta que el Real Madrid se retrate. Pura estrategia.
El Vicente Calderón, con capacidad para 54.000 espectadores, era otra opción viable hasta que se confirmó que para el día 20 de mayo está programado un concierto de Coldplay.
Cobra peso el rumor de La Cartuja. Ofrece 60.000 localidades pero Sevilla está muy lejos de Bilbao (862 kilómetros) y de Barcelona (1.046). Entre el resto de opciones, emerge de nuevo Mestalla como la menos mala. Pero en el recuerdo de bilbaínos y barceloneses está el polémico reparto de entradas en 2009, ya que los finalistas solo dispusieron de 18.000 'tickets'. El lío solo ha empezado, aunque desde la Federación se confía en que Florentino Pérez recapacite y cambie de idea. Recibirá presiones directas o indirectas desde la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, los dos finalistas e incluso de la Casa Real, que al parecer desea una final en la capital.
Se cumpliría el sueño de dos hinchadas que, al verse en la final, gritaron aquello de «sí, sí, sí, nos vamos a Madrid».